La Voz
El extitular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (Arca), Juan Pazo, cuestionó con dureza el sistema tributario previo a la sanción de la Ley de Inocencia Fiscal y lo definió como “un régimen soviético” que trataba a todos los ciudadanos como culpables.
En declaraciones radiales, sostuvo que la nueva normativa busca simplificar controles, eliminar registros innecesarios y cambiar la lógica de fiscalización del Estado.
“El régimen anterior perseguía a todos por igual, pero no lograba detectar la informalidad deliberada y sofisticada”, afirmó Pazo este sábado a Radio Rivadavia. Según explicó, el organismo recibía información irrelevante sobre consumos mínimos, como gastos con tarjeta por montos insignificantes o servicios básicos, lo que terminaba saturando los sistemas de control.
Las declaraciones se dieron tras la aprobación en el Congreso de la Ley de Inocencia Fiscal, una iniciativa del Gobierno nacional que modifica el régimen penal tributario, redefine los mecanismos de fiscalización y eleva los umbrales a partir de los cuales una infracción pasa a ser delito penal.
Un cambio de enfoque en la fiscalización
Pazo explicó que la lógica de la reforma apunta a un cambio estructural en la relación entre el Estado y los contribuyentes. “Pasamos de un régimen persecutorio, donde todos eran culpables hasta que Arca demostrara lo contrario, a uno en el que todos somos inocentes y libres de disponer del fruto de nuestro esfuerzo”, sostuvo.
Según el exfuncionario, la acumulación de datos irrelevantes impedía detectar maniobras complejas de evasión. Con el nuevo esquema, dijo, el organismo podrá concentrar sus denuncias ante la Justicia solo en casos donde existan movimientos financieros sin sustento económico.
En ese sentido, defendió la eliminación de regímenes informativos que obligaban a reportar consumos cotidianos, una práctica que, a su criterio, no mejoraba la recaudación ni la eficiencia del control fiscal.
El régimen simplificado de Ganancias
Uno de los ejes centrales de la reforma es el régimen opcional de declaración jurada simplificada del Impuesto a las Ganancias. Pazo destacó que este sistema automatiza el proceso y garantiza mayor privacidad sobre los gastos personales.
“A partir de ahora, para quienes adhieran, los consumos se vuelven anónimos. Arca le presenta al ciudadano cuánto debería pagar en base a la información disponible, y el usuario solo revisa y edita”, explicó.
El extitular del organismo subrayó que este esquema evita que un contribuyente común deba enfrentar la misma complejidad administrativa que una gran empresa, lo que, según dijo, reduce errores y costos de cumplimiento.
Formalización y acceso al crédito
Pazo vinculó la Ley de Inocencia Fiscal con un incentivo a la formalización de la economía. A su entender, un sistema menos invasivo permite que más personas declaren sus ingresos y recuperen el acceso al crédito.
“No puede ser que en Argentina se compren zapatillas en 24 cuotas y una casa al contado”, afirmó, al señalar que la informalidad limita el financiamiento a largo plazo. En ese marco, destacó que la actual administración logró reducir la presión tributaria en más de 2,5 puntos del PBI.
El extitular de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (Arca), Juan Pazo, cuestionó con dureza el sistema tributario previo a la sanción de la Ley de Inocencia Fiscal y lo definió como “un régimen soviético” que trataba a todos los ciudadanos como culpables. En declaraciones radiales, sostuvo que la nueva normativa busca simplificar controles, eliminar registros innecesarios y cambiar la lógica de fiscalización del Estado.“El régimen anterior perseguía a todos por igual, pero no lograba detectar la informalidad deliberada y sofisticada”, afirmó Pazo este sábado a Radio Rivadavia. Según explicó, el organismo recibía información irrelevante sobre consumos mínimos, como gastos con tarjeta por montos insignificantes o servicios básicos, lo que terminaba saturando los sistemas de control.Las declaraciones se dieron tras la aprobación en el Congreso de la Ley de Inocencia Fiscal, una iniciativa del Gobierno nacional que modifica el régimen penal tributario, redefine los mecanismos de fiscalización y eleva los umbrales a partir de los cuales una infracción pasa a ser delito penal.Un cambio de enfoque en la fiscalizaciónPazo explicó que la lógica de la reforma apunta a un cambio estructural en la relación entre el Estado y los contribuyentes. “Pasamos de un régimen persecutorio, donde todos eran culpables hasta que Arca demostrara lo contrario, a uno en el que todos somos inocentes y libres de disponer del fruto de nuestro esfuerzo”, sostuvo.Según el exfuncionario, la acumulación de datos irrelevantes impedía detectar maniobras complejas de evasión. Con el nuevo esquema, dijo, el organismo podrá concentrar sus denuncias ante la Justicia solo en casos donde existan movimientos financieros sin sustento económico.En ese sentido, defendió la eliminación de regímenes informativos que obligaban a reportar consumos cotidianos, una práctica que, a su criterio, no mejoraba la recaudación ni la eficiencia del control fiscal.El régimen simplificado de GananciasUno de los ejes centrales de la reforma es el régimen opcional de declaración jurada simplificada del Impuesto a las Ganancias. Pazo destacó que este sistema automatiza el proceso y garantiza mayor privacidad sobre los gastos personales.“A partir de ahora, para quienes adhieran, los consumos se vuelven anónimos. Arca le presenta al ciudadano cuánto debería pagar en base a la información disponible, y el usuario solo revisa y edita”, explicó.El extitular del organismo subrayó que este esquema evita que un contribuyente común deba enfrentar la misma complejidad administrativa que una gran empresa, lo que, según dijo, reduce errores y costos de cumplimiento.Formalización y acceso al créditoPazo vinculó la Ley de Inocencia Fiscal con un incentivo a la formalización de la economía. A su entender, un sistema menos invasivo permite que más personas declaren sus ingresos y recuperen el acceso al crédito.“No puede ser que en Argentina se compren zapatillas en 24 cuotas y una casa al contado”, afirmó, al señalar que la informalidad limita el financiamiento a largo plazo. En ese marco, destacó que la actual administración logró reducir la presión tributaria en más de 2,5 puntos del PBI.
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