La Voz

El oficialismo se encamina a aprobar la primera ley de Presupuesto de la gestión de Javier Milei. En una sesión marcada por denuncias de nulidades por parte del kirchnerismo, La Libertad Avanza confía en avalar el proyecto con apoyo del PRO, la UCR y oficialismos provinciales, aunque persiste la tensión por el futuro de los artículos que eliminan pisos de inversión en educación y en Ciencia y Tecnología.

Los libertarios lograron un primer envión, al ganar dos votaciones de forma. En la primera (que salió 43 a 29), consiguieron validar la integración de las comisiones luego de que el peronismo denunciara haber sido perjudicado en el reparto de lugares. En la segunda (que resultó 39 a 33), impusieron que el Presupuesto se vote por capítulos y no por artículos, en un intento de proteger el proyecto de posibles modificaciones.

Tras sendas votaciones, comenzó el debate del proyecto y Patricia Bullrich salió a caminar por pasillos y oficinas para cerrar los últimos acuerdos de cara a la definición final, que se producirá entrada la noche. Además de visitar los despachos de algunos senadores (incluso de la oposición), la jefa del bloque oficialista recibió al ministro del Interior, Diego Santilli, al secretario de Hacienda, Carlos Guberman, y al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem.

Los oficialistas prendían velas para que el proyecto no volviera a Diputados, donde reconocen que muchos “ya se fueron” de vacaciones. El próximo 30 de diciembre terminan las sesiones extraordinarias y Menem no tiene garantizado el quórum ahora, ni tampoco en enero. Por eso, apostaban todo a que el proyecto saliera sin modificaciones.

Las dudas recaían sobre un puñado de radicales que, al igual que el kirchnerismo, no estaban dispuestos a acompañar un recorte a fondos educativos. En este sentido, tres senadores de la UCR (el bonaerense Maximiliano Abad, el pampeano Daniel Kroneberger y el catamarqueño Flavio Fama) votaron en contra del Plan de Labor Parlamentaria, donde el oficialismo impuso la votación por capítulos en lugar de artículos.

La tensión giraba alrededor del Capítulo II, que contiene dos de los artículos controvertidos. Uno de ellos es el 30, que deroga artículos que garantizan pisos de inversión en relación al PBI para educación y para Ciencia y Tecnología. El mismo artículo elimina el Fondo Nacional para la Educación Técnico Profesional.

“Bajo el mantra del equilibrio fiscal, el Gobierno niega que la innovación y el conocimiento tengan que ver con el desarrollo”, advirtió Abad. “El artículo 30 es el ‘artículo escoba’, porque barre los pisos de inversión en educación y en Ciencia y Técnica. La justificación que he escuchado, que es que los pisos nunca se cumplieron, me parece ridícula”, disparó el titular de la UCR bonaerense.

Otro artículo cuestionado es el 12, que faculta al Ministerio de Capital Humano a interrumpir las transferencias de fondos a universidades nacionales si no envían “en tiempo y forma” la “información necesaria para asignar, ejecutar y evaluar los recursos que se les transfieren por todo concepto”.

“La Ley de Administración Financiera ya establece los mecanismos de rendición de cuentas. Yo he sido rector y he rendido cuentas toda la vida. Entiendo que se quiera hacer hincapié en el control de los fondos, pero no entiendo por qué esa facultad tiene que descansar sobre un funcionario”, objetó el catamarqueño Fama.

El objetivo del Gobierno es que el Presupuesto salga sancionado este mismo viernes para no estirar más el debate y evitar más incertidumbre en Diputados. De hecho, Bullrich se resignó días atrás a reincorporar en el proyecto el famoso Capítulo XI (suprimido por la oposición), donde se derogaban las leyes que otorgaban más fondos a universidades y el sistema de discapacidad.

A pesar del revés sufrido en Diputados con ese capítulo, en el Gobierno terminaron reconociendo que el proyecto girado al Senado no dista demasiado de las pretensiones originales. Reafirman que, pase lo que pase, se mantendrá el objetivo de obtener un resultado financiero “equilibrado o superavitario”, tal como se proyecta en el artículo primero.

“Este Presupuesto cumple con algo lógico que no se cumplió en los últimos 13 años: el déficit cero”, dijo el presidente de la comisión homónima, Ezequiel Atauche, uno de los únicos tres libertarios anotados en una lista de oradores dominada por el peronismo (los otros dos son Bullrich y el economista que la acompañó en la lista, Agustín Monteverde).

Atauche afirmó que “este Presupuesto se elaboró de una manera distinta. En general, primero disponían todos los gatos que iba a hacer el Estado y luego se veían los recursos, y si no alcanzaba empezábamos con ajustes, que tenían que ver con préstamos, que son impuestos futuros, y con emisión monetaria, que generó la debacle inflacionaria que tuvimos esta última década”.

Desde el interbloque Popular, el exfuncionario kirchnerista Jorge “Coqui” Capitanich apuntó contra las “inconsistencias” del Presupuesto en cuanto a la proyección de inflación (10,1%), dólar ($1.423) y tasa de crecimiento (5% del PBI).

También advirtió sobre “incongruencias”. “Por un lado se compran aviones F16 por $302 millones, y por otro lado se dice que no se puede financiar el FONDEF (Fondo Nacional de la Defensa), que implica un 0,8% de los recursos corrientes ¿O compramos aviones chatarra o desfinanciamos la defensa?”, cuestionó.

​El oficialismo se encamina a aprobar la primera ley de Presupuesto de la gestión de Javier Milei. En una sesión marcada por denuncias de nulidades por parte del kirchnerismo, La Libertad Avanza confía en avalar el proyecto con apoyo del PRO, la UCR y oficialismos provinciales, aunque persiste la tensión por el futuro de los artículos que eliminan pisos de inversión en educación y en Ciencia y Tecnología.Los libertarios lograron un primer envión, al ganar dos votaciones de forma. En la primera (que salió 43 a 29), consiguieron validar la integración de las comisiones luego de que el peronismo denunciara haber sido perjudicado en el reparto de lugares. En la segunda (que resultó 39 a 33), impusieron que el Presupuesto se vote por capítulos y no por artículos, en un intento de proteger el proyecto de posibles modificaciones.Tras sendas votaciones, comenzó el debate del proyecto y Patricia Bullrich salió a caminar por pasillos y oficinas para cerrar los últimos acuerdos de cara a la definición final, que se producirá entrada la noche. Además de visitar los despachos de algunos senadores (incluso de la oposición), la jefa del bloque oficialista recibió al ministro del Interior, Diego Santilli, al secretario de Hacienda, Carlos Guberman, y al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem.Los oficialistas prendían velas para que el proyecto no volviera a Diputados, donde reconocen que muchos “ya se fueron” de vacaciones. El próximo 30 de diciembre terminan las sesiones extraordinarias y Menem no tiene garantizado el quórum ahora, ni tampoco en enero. Por eso, apostaban todo a que el proyecto saliera sin modificaciones. Las dudas recaían sobre un puñado de radicales que, al igual que el kirchnerismo, no estaban dispuestos a acompañar un recorte a fondos educativos. En este sentido, tres senadores de la UCR (el bonaerense Maximiliano Abad, el pampeano Daniel Kroneberger y el catamarqueño Flavio Fama) votaron en contra del Plan de Labor Parlamentaria, donde el oficialismo impuso la votación por capítulos en lugar de artículos.La tensión giraba alrededor del Capítulo II, que contiene dos de los artículos controvertidos. Uno de ellos es el 30, que deroga artículos que garantizan pisos de inversión en relación al PBI para educación y para Ciencia y Tecnología. El mismo artículo elimina el Fondo Nacional para la Educación Técnico Profesional. “Bajo el mantra del equilibrio fiscal, el Gobierno niega que la innovación y el conocimiento tengan que ver con el desarrollo”, advirtió Abad. “El artículo 30 es el ‘artículo escoba’, porque barre los pisos de inversión en educación y en Ciencia y Técnica. La justificación que he escuchado, que es que los pisos nunca se cumplieron, me parece ridícula”, disparó el titular de la UCR bonaerense. Otro artículo cuestionado es el 12, que faculta al Ministerio de Capital Humano a interrumpir las transferencias de fondos a universidades nacionales si no envían “en tiempo y forma” la “información necesaria para asignar, ejecutar y evaluar los recursos que se les transfieren por todo concepto”.“La Ley de Administración Financiera ya establece los mecanismos de rendición de cuentas. Yo he sido rector y he rendido cuentas toda la vida. Entiendo que se quiera hacer hincapié en el control de los fondos, pero no entiendo por qué esa facultad tiene que descansar sobre un funcionario”, objetó el catamarqueño Fama. El objetivo del Gobierno es que el Presupuesto salga sancionado este mismo viernes para no estirar más el debate y evitar más incertidumbre en Diputados. De hecho, Bullrich se resignó días atrás a reincorporar en el proyecto el famoso Capítulo XI (suprimido por la oposición), donde se derogaban las leyes que otorgaban más fondos a universidades y el sistema de discapacidad. A pesar del revés sufrido en Diputados con ese capítulo, en el Gobierno terminaron reconociendo que el proyecto girado al Senado no dista demasiado de las pretensiones originales. Reafirman que, pase lo que pase, se mantendrá el objetivo de obtener un resultado financiero “equilibrado o superavitario”, tal como se proyecta en el artículo primero.“Este Presupuesto cumple con algo lógico que no se cumplió en los últimos 13 años: el déficit cero”, dijo el presidente de la comisión homónima, Ezequiel Atauche, uno de los únicos tres libertarios anotados en una lista de oradores dominada por el peronismo (los otros dos son Bullrich y el economista que la acompañó en la lista, Agustín Monteverde).Atauche afirmó que “este Presupuesto se elaboró de una manera distinta. En general, primero disponían todos los gatos que iba a hacer el Estado y luego se veían los recursos, y si no alcanzaba empezábamos con ajustes, que tenían que ver con préstamos, que son impuestos futuros, y con emisión monetaria, que generó la debacle inflacionaria que tuvimos esta última década”.Desde el interbloque Popular, el exfuncionario kirchnerista Jorge “Coqui” Capitanich apuntó contra las “inconsistencias” del Presupuesto en cuanto a la proyección de inflación (10,1%), dólar ($1.423) y tasa de crecimiento (5% del PBI). También advirtió sobre “incongruencias”. “Por un lado se compran aviones F16 por $302 millones, y por otro lado se dice que no se puede financiar el FONDEF (Fondo Nacional de la Defensa), que implica un 0,8% de los recursos corrientes ¿O compramos aviones chatarra o desfinanciamos la defensa?”, cuestionó.  ​

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