Matías, el hijo de la reconocida cocinera Maru Botana, cumplió 22 años y su aniversario fue celebrado públicamente por su madre a través de un emotivo posteo en redes sociales. Lejos de exponer una vida de excesos o notoriedad, las imágenes compartidas reflejan el recorrido de un joven que eligió mantenerse con perfil bajo, priorizar sus afectos y construir su camino con calma, aun siendo parte de una de las familias más conocidas del país.

Así está Matías, el hijo de Maru Botana, a los 22: la vida que eligió lejos de la fama

El carrusel de fotos incluyó postales de distintas etapas de su vida. Desde imágenes de su infancia, con una estética simple y vinculada a la naturaleza, hasta retratos actuales que muestran a un Matías adulto, sereno y seguro. En el mensaje que acompañó la publicación, Maru Botana expresó su orgullo por la persona en la que se convirtió su hijo y destacó valores como la gratitud, el equilibrio emocional y la importancia de disfrutar el proceso de crecer.

Así está Matías, el hijo de Maru Botana, a los 22: la vida que eligió lejos de la fama

Matías, el hijo de Maru Botana que mantiene un perfil bajo

La cocinera también hizo referencia al peso simbólico que tiene esta fecha para su familia, resignificada con el paso del tiempo como un recordatorio de aprendizaje y fortaleza. En ese marco, definió a Matías como un joven tranquilo, reflexivo y en pleno proceso de asumir responsabilidades, siempre con los pies sobre la tierra.

Así está Matías, el hijo de Maru Botana, a los 22: la vida que eligió lejos de la fama

El presente de Matías está marcado por una fuerte pasión por los viajes. Gran parte de las imágenes más recientes lo muestran recorriendo distintos destinos, muchas veces acompañado por su novia, Simona, conocida como Simo, una joven influencer con la que mantiene una relación estable. La pareja comparte experiencias, escapadas y momentos cotidianos, lejos del exhibicionismo, pero con naturalidad.

Así está Matías, el hijo de Maru Botana, a los 22: la vida que eligió lejos de la fama

Las fotos junto a Simo reflejan complicidad y un vínculo afianzado, en sintonía con la vida que Matías parece haber elegido: afectos sólidos, curiosidad por el mundo y una identidad propia, construida sin depender del apellido.

​Matías, el hijo de la reconocida cocinera Maru Botana, cumplió 22 años y su aniversario fue celebrado públicamente por su madre a través de un emotivo posteo en redes sociales. Lejos de exponer una vida de excesos o notoriedad, las imágenes compartidas reflejan el recorrido de un joven que eligió mantenerse con perfil bajo, priorizar sus afectos y construir su camino con calma, aun siendo parte de una de las familias más conocidas del país.El carrusel de fotos incluyó postales de distintas etapas de su vida. Desde imágenes de su infancia, con una estética simple y vinculada a la naturaleza, hasta retratos actuales que muestran a un Matías adulto, sereno y seguro. En el mensaje que acompañó la publicación, Maru Botana expresó su orgullo por la persona en la que se convirtió su hijo y destacó valores como la gratitud, el equilibrio emocional y la importancia de disfrutar el proceso de crecer.Matías, el hijo de Maru Botana que mantiene un perfil bajoLa cocinera también hizo referencia al peso simbólico que tiene esta fecha para su familia, resignificada con el paso del tiempo como un recordatorio de aprendizaje y fortaleza. En ese marco, definió a Matías como un joven tranquilo, reflexivo y en pleno proceso de asumir responsabilidades, siempre con los pies sobre la tierra.El presente de Matías está marcado por una fuerte pasión por los viajes. Gran parte de las imágenes más recientes lo muestran recorriendo distintos destinos, muchas veces acompañado por su novia, Simona, conocida como Simo, una joven influencer con la que mantiene una relación estable. La pareja comparte experiencias, escapadas y momentos cotidianos, lejos del exhibicionismo, pero con naturalidad.Las fotos junto a Simo reflejan complicidad y un vínculo afianzado, en sintonía con la vida que Matías parece haber elegido: afectos sólidos, curiosidad por el mundo y una identidad propia, construida sin depender del apellido.  La Voz

About The Author