Instituto transita días importantes puertas adentro. Luego de quedar fuera de la definición del Torneo Clausura, en Alta Córdoba se impuso una etapa de análisis, autocrítica y evaluación profunda sobre lo ocurrido en esta segunda parte del año.
La sensación general es que el objetivo trazado no se alcanzó y que será necesario dar un giro de cara a la próxima temporada.
En ese contexto, el presidente Juan Manuel Cavagliatto tomó el mando de las decisiones más sensibles que deberá asumir el club. Con la convicción de mejorar la producción futbolística y elevar la vara en 2026, en los últimos días se llevaron a cabo reuniones de todo tipo.
Una de ellas fue con el director técnico Daniel Oldrá, quien tiene contrato vigente y todo indica que continuará en su cargo. Lo mismo ocurre con el mánager Federico Bessone, que también seguiría formando parte de la estructura.
A su vez, hubo conversaciones con varios jugadores cuyos vínculos finalizan el 31 de diciembre y que están en carpeta para seguir en el plantel que afrontará el próximo año.
La dirigencia pretende resolver esas situaciones cuanto antes para encarar con mayor claridad el armado del equipo.
Si bien el plantel está licenciado y volverá a entrenarse recién el 15 de diciembre, se estima que la próxima semana llegará con anuncios relevantes en relación al proyecto deportivo y a la planificación general para 2026.
Expectativa no falta: los hinchas y socios aguardan definiciones que permitan vislumbrar el rumbo que tomará la institución.
Mientras tanto, en Instituto se trabaja a ritmo acelerado y con la idea firme de generar un cambio profundo para la próxima temporada, que tendrá su punto de partida el viernes 23 de enero, cuando dé inicio el Torneo Apertura 2026.
Instituto transita días importantes puertas adentro. Luego de quedar fuera de la definición del Torneo Clausura, en Alta Córdoba se impuso una etapa de análisis, autocrítica y evaluación profunda sobre lo ocurrido en esta segunda parte del año. La sensación general es que el objetivo trazado no se alcanzó y que será necesario dar un giro de cara a la próxima temporada.En ese contexto, el presidente Juan Manuel Cavagliatto tomó el mando de las decisiones más sensibles que deberá asumir el club. Con la convicción de mejorar la producción futbolística y elevar la vara en 2026, en los últimos días se llevaron a cabo reuniones de todo tipo. Una de ellas fue con el director técnico Daniel Oldrá, quien tiene contrato vigente y todo indica que continuará en su cargo. Lo mismo ocurre con el mánager Federico Bessone, que también seguiría formando parte de la estructura.A su vez, hubo conversaciones con varios jugadores cuyos vínculos finalizan el 31 de diciembre y que están en carpeta para seguir en el plantel que afrontará el próximo año. La dirigencia pretende resolver esas situaciones cuanto antes para encarar con mayor claridad el armado del equipo.Si bien el plantel está licenciado y volverá a entrenarse recién el 15 de diciembre, se estima que la próxima semana llegará con anuncios relevantes en relación al proyecto deportivo y a la planificación general para 2026. Expectativa no falta: los hinchas y socios aguardan definiciones que permitan vislumbrar el rumbo que tomará la institución.Mientras tanto, en Instituto se trabaja a ritmo acelerado y con la idea firme de generar un cambio profundo para la próxima temporada, que tendrá su punto de partida el viernes 23 de enero, cuando dé inicio el Torneo Apertura 2026. La Voz
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