Un joven que manejaba borracho chocó contra una comisaría y tras realizarle el test de alcoholemia se constató que el hombre tenía 1,61 gramos de alcohol por litro de sangre.
El insólito caso sucedió el sábado por la mañana cuando el chico de 26 años perdió el control del vehículo en las calles Mendoza y Ministro Joaquín González, en Neuquén, y quedó colgado de un muro de decoración de la comisaría 1°.
De acuerdo al parte policial que publicaron medios locales, en el auto Volkswagen Golf viajaban dos jóvenes, los cuales se encontraban bajo los efectos del alcohol.
Lo curioso, y que sorprendió a los agentes policiales, es cómo quedó el vehículo. En las imágenes difundidas se observa al rodado arriba de un cantero y con las ruedas traseras en el aire.
Después del sorpresivo hecho, se le realizó el test de alcoholemia, el cual arrojó resultado positivo con 1,61 gramos de alcohol por litro de sangre.
A su vez, se constató que el chofer tampoco contaba con la documentación requerida, motivo por el cual auto fue secuestrado.
Acerca de la salud de los jóvenes, se anunció que ambos resultaron ilesos pese a que el auto quedó colgado.
NA
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