En el punto más alto del fenómeno Muñeca Brava, Natalia Oreiro tomó una importante decisión: compró su primera casa en Buenos Aires. Tenía apenas 21 años y ya era una figura central del entretenimiento rioplatense. La propiedad elegida no era una vivienda estándar, sino una mansión de valor histórico ubicada en uno de los pasajes más emblemáticos y escondidos de la ciudad.

La histórica mansión porteña que Natalia Oreiro compró con el éxito de Muñeca Brava: dónde está y cómo es por dentro

La casa, construida en 1887 por la reconocida familia Alvear, atrapó a Oreiro desde el primer momento. La actriz describió aquella visita inicial como “amor a primera vista”. La residencia se convirtió rápidamente en su refugio, un espacio donde convivían arte, arquitectura y una energía que, con el paso de los años, terminaría atrayendo a fanáticos de distintas partes del mundo.

La histórica mansión porteña que Natalia Oreiro compró con el éxito de Muñeca Brava: dónde está y cómo es por dentro

La mansión cuenta con 480 metros cuadrados cubiertos, distribuidos en dos plantas, y se asienta sobre un terreno de 25 por 27 metros. En ese espacio se organizan tres dormitorios, tres baños y una serie de ambientes diseñados con estilos variados, sin perder la identidad histórica de la construcción original. Uno de los puntos más singulares del frente es la presencia de una palmera y un caballo multicolor, elementos que se volvieron parte del sello visual de la propiedad.

La histórica mansión porteña que Natalia Oreiro compró con el éxito de Muñeca Brava: dónde está y cómo es por dentro

Cómo es el interior de la mansión que compró Natalia Oreiro a los 21 años

En el interior, los detalles arquitectónicos combinan materiales nobles y elementos de época. El palier conserva los pisos de mármol originales, mientras que otros ambientes incorporan estilos más contemporáneos. El comedor diario, por ejemplo, está diseñado con hierro y vidrio, y el bar mantiene tallado el escudo de la familia Alvear, un rasgo que vincula directamente al inmueble con su origen aristocrático.

La histórica mansión porteña que Natalia Oreiro compró con el éxito de Muñeca Brava: dónde está y cómo es por dentro

Oreiro vivió allí durante años junto a Ricardo Mollo. En 2016, la pareja decidió vender la residencia, aunque conservaron el estudio de grabación ubicado dentro del predio, lo que les permitió seguir visitando el lugar. El actual propietario relató que, desde que compró la casa, recibe de manera frecuente a fanáticos internacionales —sobre todo jóvenes rusos— que viajan hasta Argentina para conocer el hogar donde vivió la protagonista de Muñeca Brava.

​En el punto más alto del fenómeno Muñeca Brava, Natalia Oreiro tomó una importante decisión: compró su primera casa en Buenos Aires. Tenía apenas 21 años y ya era una figura central del entretenimiento rioplatense. La propiedad elegida no era una vivienda estándar, sino una mansión de valor histórico ubicada en uno de los pasajes más emblemáticos y escondidos de la ciudad.La casa, construida en 1887 por la reconocida familia Alvear, atrapó a Oreiro desde el primer momento. La actriz describió aquella visita inicial como “amor a primera vista”. La residencia se convirtió rápidamente en su refugio, un espacio donde convivían arte, arquitectura y una energía que, con el paso de los años, terminaría atrayendo a fanáticos de distintas partes del mundo.La mansión cuenta con 480 metros cuadrados cubiertos, distribuidos en dos plantas, y se asienta sobre un terreno de 25 por 27 metros. En ese espacio se organizan tres dormitorios, tres baños y una serie de ambientes diseñados con estilos variados, sin perder la identidad histórica de la construcción original. Uno de los puntos más singulares del frente es la presencia de una palmera y un caballo multicolor, elementos que se volvieron parte del sello visual de la propiedad.Cómo es el interior de la mansión que compró Natalia Oreiro a los 21 añosEn el interior, los detalles arquitectónicos combinan materiales nobles y elementos de época. El palier conserva los pisos de mármol originales, mientras que otros ambientes incorporan estilos más contemporáneos. El comedor diario, por ejemplo, está diseñado con hierro y vidrio, y el bar mantiene tallado el escudo de la familia Alvear, un rasgo que vincula directamente al inmueble con su origen aristocrático.Oreiro vivió allí durante años junto a Ricardo Mollo. En 2016, la pareja decidió vender la residencia, aunque conservaron el estudio de grabación ubicado dentro del predio, lo que les permitió seguir visitando el lugar. El actual propietario relató que, desde que compró la casa, recibe de manera frecuente a fanáticos internacionales —sobre todo jóvenes rusos— que viajan hasta Argentina para conocer el hogar donde vivió la protagonista de Muñeca Brava.  La Voz

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