La administración del intendente Leonel Monsalve, de Juntos por el Cambio, (foto) le informó a su familia que no tiene plata y la única asistencia que le mantuvo es la compra de las cremas que necesita.
La pequeña Abigaíl Mendoza, de tres años, quien sigue recuperándose de las graves quemaduras que sufrió en el mes de octubre de 2021, vive junto a su familia en total precariedad en una vivienda a medio terminar que no reúne las condiciones necesarias para su cuidado, desde que el municipio le retiró la ayuda que le brindaba para afrontar el alquiler de una casa segura para ella.
Después de que el nuevo Gobierno municipal, a cargo de Leonel Monsalve, de Juntos por el Cambio, les comunicara que «no hay plata», la nena, sus padres y su hermano se mudaron a la vivienda que su papá estaba construyendo, que no cuenta con calefacción ni agua caliente y en estos días de intensas lluvias tiene importantes filtraciones, ante lo cual la asistencia de la comuna consistió en «que primero le llevaron un nailon que le faltaba un pedazo, no le alcanzó para cubrir, y luego le llevaron otro y les han dicho que no hay más», según contó la abuela paterna de Abigaíl, Florinda Valdez, quien reclamó «una casa de urgencia para mi nieta, que me la saquen de donde está».
En una entrevista radial con FM Láser de Catriel, la mujer explicó que la niña «se quemó con grasa todo el cuerpo, estuvo mucho tiempo internada en el Hospital Garrahan y hasta los 18 años los médicos creen que todavía va a tener que ir, y no sé si no más, porque le faltan cirugías».
«Cuando le dieron el alta, le dieron un certificado habitacional donde dice que la nena tiene que llegar a una casa buena, que tenga ciertas condiciones», y en el municipio, entonces bajo la intendencia de Abel Abeldaño, «dijeron que sí, que buscáramos un alquiler con la asistente social», recordó, y señaló que tampoco era una gran vivienda: «Era una pieza, un baño y un pasillo, ni patio tenía la nena para la rehabilitación».
«Cuando entra el señor Monsalve, les dijo que no tenían plata, que no les iba a poder dar más la ayuda y que lo único que le iban a dar eran las cremas (para su tratamiento), porque eran muy caras», indicó.
Ante esa situación, y debido a que el sueldo que cobra el papá de Abigaíl como contratado en la Municipalidad no le alcanzaba para pagar el alquiler, fue que debieron mudarse a la casa a medio construir. «Mi hijo tenía en ese tiempo un salón levantado hasta la altura del encarenado, el otro intendente le dio las chapas y lo pudo techar, pero no tiene piso, no tiene revoque, no tiene nada… No hay gas ni agua adentro», contó Valdez.
Además, resaltó que su hijo está asignado al sector de cloacas y eso también supone un peligro para la pequeña, por la posibilidad de causarle infecciones. «Es un riesgo para la nena donde él trabaja, se tiene que bañar afuera antes de entrar, sacarse la ropa, porque no puede entrar con la nena, porque se le lastima la piel», explicó, y pidió también que lo trasladen a otra área.
El accidente
El accidente que le causó graves quemaduras a la pequeña ocurrió en la mañana del 28 de octubre de 2022, cuando la mamá se encontraba cocinando tortas fritas para salir a vender y la nena, entonces de un año y cuatro meses de edad, se volcó la grasa hirviendo encima.
En un primer momento fue traslada de urgencia a General Acha y de allí a Santa Rosa, desde donde la llevaron en el avión ambulancia al Hospital Garrahan de Buenos Aires, donde permaneció internada varios meses y fue sometida a una serie de cirugías.
Finalmente fue dada de alta pero debe continuar con el tratamiento por lo menos hasta los 18 años, por lo que debe regresar periódicamente al nosocomio porteño para efectuarse los controles correspondientes.
«Ahora en septiembre tiene que ir de vuelta a Buenos Aires y todo el tiempo es una pelea para conseguirle los pasajes y para que le den un lugar donde se queden en Santa Rosa para tomar el otro colectivo a Buenos Aires», contó su abuela, que resaltó por otro lado la asistencia que se le brinda allí desde la Casa de La Pampa.
ElDiario
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