«Cuando terminó el partido entré al vestuario, un policía custodiaba una puerta, pero por otra entraron tres tipos con palos en las manos y nos quisieron agredir. Empezamos a gritar con los asistentes y un jugador de Guardia del Monte, César Viñas, los sacó. Según me dijeron, eran exdirigentes de Independiente de Rivera», contó Villalba a Diario Textual.
«En el vestuario esperamos cincuenta minutos y la gente no se iba. Apenas salimos de la cancha, nos siguieron cuatro o cinco autos y cuando subí a la ruta para volver a Santa Rosa una camioneta Volkswagen Amarok me quiso chocar y otro auto se me puso adelante y me frenó», relató el árbitro.
«Me hicieron bajar a la banquina y la Policía intervino. Yo pedí custodia para seguir y cargué a un efectivo policial adentro del auto», dijo Villalba.
«Los autos nos siguieron hasta pasando el cruce con un puesto caminero y dejaron de hacerlo cuando frené nuevamente y se bajó el policía que iba con nosotros. En ese momento le dije que quería hacer la denuncia, pero me respondió: ‘ustedes no son del pueblo, no los conocemos’. Entonces le dije que por lo menos nos saquen del pueblo. Fue muy feo. Esperemos que alguien tome cartas en el asunto», reclamó el árbitro.
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