La Voz
Los gremios estatales que aportan a la Caja de Jubilaciones de Córdoba hicieron una convocatoria de urgencia este lunes frente a la Casa de Gobierno. Será una conferencia de prensa en la que estarán los secretarios generales.
Allí, denunciaron la decisión del Ejecutivo provincial de avanzar con nuevos descuentos previsionales sobre los salarios de los activos, en el marco de la reforma que impulsa Martín Llaryora para sostener el sistema jubilatorio.
La protesta se dio horas antes de que el Gobierno dé los detalles de la nueva ley en la que, entre otras cuestiones, se establecen aportes adicionales por tramo de ingresos de los empleados (en los salarios más altos llegarán hasta ocho puntos extra), además del aumento en la retención para la obra social Apross.
El esquema, presentado como transitorio y atado a futuros aumentos, generá un fuerte impacto en el salario de bolsillo y explica el malestar que recorre a los distintos sectores estatales.
Los gremios advierten que la medida implica un ajuste directo sobre los trabajadores en actividad, con cargas que en algunos casos superan el 30% del salario bruto, sin contar el impuesto a las Ganancias.
También cuestionan que los cambios se definan sin negociación previa y alertan sobre el precedente que sienta la decisión de trasladar esos mayores aportes al cálculo de las jubilaciones a partir de 2026.
La conferencia, prevista en la antesala de un debate legislativo clave, busca visibilizar el rechazo sindical y anticipa un clima de conflicto que el oficialismo deberá administrar si pretende avanzar con la reforma.
Los gremios estatales que aportan a la Caja de Jubilaciones de Córdoba hicieron una convocatoria de urgencia este lunes frente a la Casa de Gobierno. Será una conferencia de prensa en la que estarán los secretarios generales. Allí, denunciaron la decisión del Ejecutivo provincial de avanzar con nuevos descuentos previsionales sobre los salarios de los activos, en el marco de la reforma que impulsa Martín Llaryora para sostener el sistema jubilatorio.La protesta se dio horas antes de que el Gobierno dé los detalles de la nueva ley en la que, entre otras cuestiones, se establecen aportes adicionales por tramo de ingresos de los empleados (en los salarios más altos llegarán hasta ocho puntos extra), además del aumento en la retención para la obra social Apross. El esquema, presentado como transitorio y atado a futuros aumentos, generá un fuerte impacto en el salario de bolsillo y explica el malestar que recorre a los distintos sectores estatales.Los gremios advierten que la medida implica un ajuste directo sobre los trabajadores en actividad, con cargas que en algunos casos superan el 30% del salario bruto, sin contar el impuesto a las Ganancias. También cuestionan que los cambios se definan sin negociación previa y alertan sobre el precedente que sienta la decisión de trasladar esos mayores aportes al cálculo de las jubilaciones a partir de 2026.La conferencia, prevista en la antesala de un debate legislativo clave, busca visibilizar el rechazo sindical y anticipa un clima de conflicto que el oficialismo deberá administrar si pretende avanzar con la reforma.
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