El diputado pampeano Sergio Ziliotto defendió la posición de su bloque de no dar quórum para realizar una sesión especial en la Cámara de Diputados de la Nación para tratar el acuerdo del Gobierno nacional con el FMI. Dijo que la firma de ese acuerdo es una atribución del Poder Ejecutivo.
Legisladoras y legisladores del kirchnerismo, el Movimiento Evita, sectores del PJ y la izquierda habían impulsado una sesión especial -que Ziliotto calificó de “testimonial”- para que el acuerdo que firmó Macri con el Fondo fuera tratado por el Congreso.
El Frente Peronista Barrial había fustigado a Ziliotto, Ariel Rauschenberger y Melina Delú por ser parte de los diputados que frustaron esa sesión, donde solo 83 legisladores se hicieron presentes.
“Cuando, a partir de una frustrada sesión testimonial, se duda del rol que cada uno asumirá ante el ajuste acordado entre el Gobierno de Macri y Fondo Monetario Internacional resulta inevitable apelar a la esencia de nuestro movimiento. ‘Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada’ decía Juan Domingo Perón”, apuntó el legislador pampeano.
Justificó la decisión al sostener que el acuerdo es una atribución del Poder Ejecutivo. “La Ley 24156 de Administración Financiera en su artículo 60 establece que la aprobación de este tipo de préstamos no corresponde al Congreso Nacional sino directamente al Poder Ejecutivo, en uso de una clara facultad delegada del artículo 75 de la Constitución Nacional que el propio Parlamento otorgó”, remarcó.
“Como tantas facultades delegadas que han vaciado la soberanía del Congreso, esta ley está vigente desde hace muchos años. Desde 1992 para ser precisos. Veintiséis años pasaron, se podría haber modificado. No hubo voluntad política, claro. Ello hubiera sido más efectivo que una sesión que, ya al momento de su llamado, sólo podía aspirar a ser un encuentro testimonial”, insistió el diputado.
Ziliotto recordó que en enero de este año un mega DNU del Gobierno de Macri “pretendió vaciar el fondo de reserva que garantiza el pago de las jubilaciones y pensiones, el conocido Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS)”. Y advirtió que no ocurrió por una ley que él -entre otros- impulsó. “Fue aprobada por el Congreso Nacional y lo impidió. Eso sí, no fue unánime esa votación. El sector que convocó a esta sesión testimonial votó en contra, tanto en Diputados como en Senadores. Privilegiaron un posicionamiento político sectorial antes que una solución concreta para el futuro de los jubilados y de los trabajadores que, mes a mes, aportan a dicho fondo de reserva”, señaló.
“El rol que le ha quedado al Congreso Nacional será debatir las herramientas que necesita el Gobierno nacional para hacer efectivo el ajuste que acordó con el FMI. El debate crucial será por el Presupuesto Nacional, las reformas previsional y laboral, la venta del Fondo de Garantía de Sustentabilidad y otros temas que surgirán de la letra chica del acuerdo. Ahí se verá el lugar que cada uno ocupa. Defendiendo los intereses de los argentinos. Sin declamaciones ni demagogia. Con hechos”, cerró.
EL Diario de La Pampa
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