En diálogo con Impacto Castex, habló una mujer que vive en el barrio Santa Juliana (sector norte de la localidad) y allí posee una peluquería.
La mujer y su marido, notaron que desde hacía algun tiempo había un faltante de dinero en la casa. Estas irregularidades la llevaron a colocar cámaras de seguridad en su vivienda y en la peluquería.
El mal sabor de boca se lo llevó cuando comprobó que su empleada es quien estaba sustrayendo dinero en pequeñas cantidades. Esto fue motivo suficiente para contactar con la comisaría, donde se pusieron manos a la obra de inmediato.
El material grabado por las cámaras sirvió para que la implicada reconozca su culpabilidad. La malechora habría sustraído a la fecha más de 100 mil pesos, de los cuales tan solo devolvió 42 mil ya que el resto fue gastado.
La empleada tiene entre 45 y 50 años y pasó unas horas demorada, el dinero que hurtó no era en su totalidad propiedad de su empleadora sino que también pertenecían a un familiar que había ahorrado y confiado el dinero a su familia.
La damnificada reconoce que se siente angustiada porque siempre ayudó a su empleada, se mostró generosa y predispuesta a ayudarla en todo momento. El robo que sufrió fue una traición a su confianza y difícilmente pueda recuperarla.
El comisario Marcelo Bustos Paulino informó que fue recepcionada la denuncia, la empleada fue trasladada a la sede policial y reconoció los hechos denunciados, teniendo en su poder una parte del dinero sustraído y haciendo entrega del mismo. Se iniciaron actuaciones judiciales por s/hurto, con intervención de la Dra.Cecilia Molinari.
Deja tu comentario!