Los dos acusados fueron José Antonio Selman, de 72 años, y su hijo Christian José Selman, de 38 años. El primero fue absuelto y el segundo condenado.
El campo se llama la Verbena, que se vendió a tranquera cerrada con 950 vacunos. Matei, informó Prensa del Ministerio Público Fiscal, condenó a Christian José Selman (38 años), como autor material y penalmente responsable de los delitos de estafa y estafa en grado de tentativa -dos hechos-, en concurso real, a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional. Es decir, no irá preso.
El fiscal Máximo Paulucci, en su alegato, había solicitado la prisión efectiva a los dos acusados. Los defensores Mario Aguerrido y Raúl Salvadori, en tanto, su absolución.
El comprador es de Huinca Renancó. Llegó a través de una inmobiliaria, que hizo los contactos éntre las partes.
En primer lugar, el pago se hizo en una escribanía. Selman percibió 480.000 dólares y la suma de 107.000 pesos en concepto de IVA por la venta del inmueble.
El segundo pago -con el que se concretó principalmente la estafa- en el mismo campo. Según se corroboró, el 29 de junio de 2012, Selman entregó a Sergio Darío Avancini un recibo de la operación de compra del campo del monte de cría. Fue por 870 mil dólares.
Selman, por su parte, le entregó al comprador un recibo de fecha 26 de junio de 2012 que ya tenía confeccionado y firmado. Ese pago, posteriormente, fue negado por Selman. Dijo que no era su firma.
Posteriormente, Avancini les compró, en dos operaciones, 134 y 184 animales, por lo que padre e hijo habrían recibido dos cheques.
Los jueces dieron por probado que el pago de los 870 mil dólares se hizo. «El testimonio de Sergio Avancini resultó claro, preciso y se corrobora con las manifestaciones de los testigos que depusieron y dieron cuenta de las circunstancias en que se desarrolló la firma del boleto por la adquisición del campo La Verbena y el primer pago, la adquisición de los dólares para el segundo pago, su traslado y posterior entrega a Christian Selman», dijeron.
También se apoyaron en escuchas telefónicas a Christian Selman. «La veracidad de sus dichos se diluye frente al resultado de las escuchas telefónicas incorporadas donde se evidencia su gran preocupación por ocultar documentación, la máquina de contar billetes y la información de su computadora personal. Su actuación anterior y posterior a la recepción del pago, demuestra que nunca tuvo la intención de recibir el pago en oficina alguna o en entidad bancaria. Bajo pretexto de seguridad llevó a Avancini a un ámbito en el que pudiera sorprenderlo en su buena fe, apoderarse del dinero y entregar un documento en apariencia legal que luego desconoció», expresaron los magistrados.
Fuente: Diario textual.
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