El hermano mayor de Lionel Messi protagonizó un verdadero escándalo anoche en Rosario, al discutir con efectivos de seguridad que lo abordaron cuando salía de una casa y subía a su vehículo.
Matías Messi se negó al chequeo de su Audi A5 y se trenzó en una áspera discusión con los agentes de Gendarmería, a los que sorprendió con una maniobra evasiva: según relataron autoridades judiciales a Cadena 3, decidió arrojar las llaves del auto hacia el interior de una vivienda (se cree que pertenece a un allegado) en la que luego pretendió refugiarse.
A pesar de la resistencia, los gendarmes pudieron revisar el automóvil de origen alemán y luego de unos minutos de requisa encontraron en la guantera una pistola calibre 22 que no tenía autorización.
El hermano del crack del Barcelona estuvo demorado algunas horas en la comisaría 16, hasta que recuperó la libertad; de todos modos se le abrió una causa por tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil.
Producto del forcejeo que se generó en la discusión, Matías Messi terminó con un corte en la ceja, mientras que dos efectivos fueron derivados a un sanatorio privado: un agente sufrió un golpe en un pie izquierdo y una mujer tuvo una contusión en una rodilla.
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