La preocupación por los basurales clandestinos no cesa, y esta vez el reclamo llegó desde el viejo camino a Dorila, donde un vecino de la ciudad, Mario, expresó su bronca e indignación por la conducta de personas que arrojan residuos en las banquinas.
En comunicación con En Boca de Todos HD, Mario contó que transita todos los días por el camino debido a su trabajo en el campo y que la situación es cada vez más preocupante. «El camino lo mantiene la municipalidad, está en buen estado, pero lo arruinan con la mugre que tiran al costado. Lo usan de basurero», lamentó.
El vecino describió que se pueden encontrar bolsas de residuos domiciliarios, restos de poda, muebles rotos y todo tipo de desperdicios, transformando la zona en un foco de contaminación visual y ambiental.
Mario pidió mayor control, sanciones para quienes tiran basura y más conciencia por parte de los vecinos:
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