En la madrugada de este lunes, un episodio desafortunado ocurrió en una estación de servicio situada en la ciudad de Córdoba, donde un hombre perdió la vida en circunstancias confusas que involucran a las autoridades. La víctima, identificada como Guillermo, murió en el lugar, mientras que agentes policiales han quedado bajo sospecha por un posible homicidio.
La familia de Guillermo ha denunciado lo que consideran un «accionar desmedido» de los policías presentes en el momento del incidente. Agustina, la esposa del fallecido, afirmó que un testigo corroboró que vio cómo los agentes estrangularon a su marido durante el altercado.
Alrededor de las 4 de la mañana, Guillermo llegó a la estación de servicio en la intersección de las calles Octavio Pinto y Mariano Castex, luego de finalizar su jornada laboral en una panadería. Su intención era recargar gas en su vehículo Ford Ecosport para regresar a su hogar. Al llegar, le pidió al único empleado presente que le despachara combustible por un importe de 10 mil pesos.
Sin embargo, versiones sobre lo sucedido a partir de este punto divergen. La esposa de la víctima, Agustina, relató que la discusión se suscitó debido a que Guillermo no contaba con dinero suficiente para pagar, ya que había olvidado el efectivo en su casa. Esto llevó a un intercambio acalorado entre Guillermo y el playero, quien se negó a permitir que se llevara el vehículo sin haber pagado.
En medio de la discusión, un patrullero que se encontraba en la cercanía intervino y los agentes solicitaron a Agustina que fuera a «pagar la carga de combustible». La mujer se dirigió rápidamente a su casa, ubicada a pocas cuadras, sin imaginar la situación que encontraría al regresar.
«Cuando llegué a la estación para pagar, vi a varios agentes forcejeando con mi marido, intentando subirlo al patrullero», narró Agustina. Según su versión, Guillermo, visible y comprensiblemente angustiado, trató de explicar su situación. Un policía del operativo manifestó que «se puso muy nervioso e intentamos calmarlo en vano».
Agustina afirmó que su esposo se encontraba en estado de pánico por no haber podido pagar el gas y la situación se tornó más tensa. «Los agentes me mantenían alejada, diciendo que ya era tarde y que se lo iban a llevar detenido, y que si me metía me llevarían a mí también», agregó la mujer.
«Hablé con ellos y les grité que lo dejasen, que lo iban a matar», relató con angustia Agustina. Testigos señalaron que fueron entre cuatro y cinco policias los que sometieron a Guillermo, quien se encontraba en una crisis de nervios. «Les gritaba que se sentía mal y lo subieron de prepo. Fue un momento horrible», recordó Agustina.
«Lamentablemente, ya era demasiado tarde cuando lo llevaron de vuelta al suelo después de intentar reanimarlo. Vimos cómo lo subieron al patrullero y luego lo tiraron como una bolsa de papas totalmente desplomado. No tengo dudas de que murió asfixiado», lamentó Agustina.
En medio de una conversación emocionalmente cargada, Agustina compartió su dolor: «A las 4:07 me informan que mi marido había fallecido. Me lo mató la Policía. No entiendo cómo pueden llevarlo detenido solo por no tener los 10 mil pesos para pagar».
Deja tu comentario!