El domingo se confirmó la trágica noticia que muchos temían: el cuerpo de Rubén Zalazar fue identificado. Zalazar, conductor de la camioneta donde fueron vistas por última vez Delfina y Pilar Hecker, las niñas de 1 y 5 años desaparecidas tras el temporal en Bahía Blanca, había intentado heroicamente rescatar a las hermanas y a su madre del vehículo en el que quedaron atrapados, pero la corriente los arrastró a todos.
Originario de Viedma, la capital de Río Negro, Zalazar tenía 43 años y era padre de dos hijos pequeños, Máximo y Lupe. Su trabajo como transportista lo llevaba a realizar viajes frecuentes, conduciendo una Ford Transit roja rotulada con la firma del correo privado Andreani.
La angustia de su pareja, Valeria, se hizo evidente en las redes sociales, donde solicitó ayuda para localizar a Rubén, de quien no tenía noticias desde el sábado a las 9 de la mañana. “Necesito dar con el paradero de Rubén Zalazar. Él viajó de Viedma hacia Bahía Blanca en una combi de Andreani, quedó varado cuando quiso volver por la zona de ‘El Cholo’ / Cerri», escribió Valeria.
En su mensaje, Valeria también mencionó un detalle crucial: «Lo único que pude saber es que las nenas desaparecidas (Pilar y Delfina) estuvieron arriba de su camioneta», agregó.
El ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, confirmó este domingo el hallazgo del cuerpo de Rubén. “Encontramos al muchacho sin vida que estaba en la camioneta de Andreani. Estamos profundizando la búsqueda en esos lugares. Es una búsqueda que se está haciendo con medios y equipo de navegación”, dijo Alonso.
Valeria expresó su gratitud en redes sociales tras la confirmación del hallazgo: «Encontraron el cuerpo de Rubén cerca de la zona de su desaparición. Gracias a todos por preocuparse y ayudarme en todo lo que pudieron».
La conexión entre el trágico desenlace de Rubén y la desaparición de las hermanitas se remontó al viernes, cuando el vehículo en el que viajaban se quedó atascado en medio del temporal. Alonso relató que «un muchacho de Andreani con una camioneta se ofreció a llevarlas a las tres, pero cuando hicieron unos metros una corriente de agua arrastró la camioneta unos 350 metros y se empezó a llenar de agua».
Delfina y Pilar Hecker, las hermanas desaparecidas en Bahía Blanca
La madre, sus dos hijas y el conductor que intentó ayudarlas «subieron a los techos y en segundos fueron arrastrados por el agua, que en dos minutos subió dos metros», continuó Alonso.
La fuerza del agua fue devastadora. La única que logró escapar fue la madre de las niñas, aunque 1.200 metros más adelante, en una zona cercana a un desarmadero. Allí se reencontró con su esposo, Andrés Hecker, padre de Delfina y Pilar.
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