Jesús Chiaraviglio, hermano de Nicolás, el joven motociclista piquense que perdió la vida al ser chocado por una camioneta conducida por el futbolista del Corinthians de Brasil, Rodrigo Garro, lamentó que la defensa del imputado esté “buscando echarle la culpa” del choque a su hermano: es que lo acusan de ir sin las luces encendidas de su moto. “El (por el futbolista Garro) estaba festejando su cumpleaños y dicen que tenía 0,54 gramos de alcohol en sangre, pero creo que no es verdad porque ¿quién va a festejar y va a tomar dos copas nada más?”, dudó. “Lamentablemente todos sabemos cómo termina esto: Garro va a pagar y va a seguir su carrera como si nada”, dijo.
El joven habló en el programa “La llave de la mañana”, de FM Láser, y allí expresó su dolor por la pérdida de su hermano. “Llevamos este momento como podemos. A mi mamá le tengo que dar calmantes porque una madre nunca está preparada para perder un hijo”, dijo.
“(Garro) estaba festejando su cumpleaños y dicen que tenía 0,54 gramos de alcohol en sangre, pero creo que no es verdad. ¿Quién va a festejar un cumpleaños y va a tomar dos copas nada más? Ahora está libre, en Brasil, pero mi hermano está adentro de un cajón y nosotros llorando. Si no fuera un futbolista importante como él, ya estaría preso”, aseveró.
Ni una disculpa
Recordó que su hermano “vívía el día a día porque él decía que cuando se vaya no se iba a llevar nada” y aseguró que “el boxeo era todo para él, lo ponía contento”.
¿Cómo sigue ahora la causa? “Garro va a pagar, va a poner la plata, se va a ir y va a seguir su carrera como si nada. Todos lo sabemos, no solamente yo”, cerró.
El choque
Nicolás era soltero y era empleado en Margaría, una empresa de venta de neumáticos. Paralelamente, era un boxeador amateur.
Murió en un choque a las 2.45 de la mañana del sábado último en la calles 300 y 108. Chocó en su moto con una camioneta Dodge Ram conducida por Garro, que ese día cumplió 27 años.
Según los informes iniciales, ambos vehículos circulaban en sentidos opuestos por la calle 300, hasta que Garro, aparentemente intentando girar hacia la izquierda por la calle 108, colisionó contra la motocicleta.
El fiscal Francisco Cuenca confirmó que Chiaraviglio no llevaba casco y que la brutalidad del impacto resultó fatal de inmediato. Fue asistido por una enfermera que vive en las inmediaciones, pero todo fue infructuoso.
El otro dato, que aún no fue verificado, es lo que dijo Garro: que no vio la moto porque llevaba las luces apagadas.
Homicidio culposo
Garro fue acusado por la Justicia por homicidio culposo por conducción imprudente, lo inhabilitaron para manejar, pero puede salir del país y viajar a Brasil para jugar al fútbol.
La calificación hubiera sigo más grave si hubiera tenido 1 gramo por litro (g/l) de alcohol o más, pero como Garro dio en el test de alcoholemia 0,54 se formalizó bajo esa figura penal.
diariotextual
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