El alerta llegó pasadas las 21 horas, cuando los moradores de la casa notaron que el perro, había desaparecido de manera repentina. Al asomarse al sector de un antiguo bombeador, advirtieron que el animal se encontraba en el fondo del pozo, que afortunadamente no contenía agua en su interior.
A las 21:18, los bomberos voluntarios arribaron al lugar con el equipamiento necesario para realizar la operación de rescate. Siguiendo el protocolo, primero aseguraron la zona y luego dispusieron una estructura firme sobre la boca del pozo. Con ayuda de cuerdas, uno de las efectivos descendió lentamente, siempre en comunicación con sus compañeros, hasta llegar al perro.
El ascenso con el can se produjo a las 21:43, en medio de la emoción y el alivio de quienes presenciaban la escena. El cachorro fue examinado rápidamente y se comprobó que, más allá del susto, no presentaba lesiones de consideración.
“Por fortuna, el pozo estaba seco. De haber tenido agua, el resultado podría haber sido otro”, comentó uno de los vecinos a infopico.com, visiblemente aliviado.
El rescate, que duró poco más de 20 minutos, se resolvió gracias al rápido accionar de los bomberos voluntarios, quienes una vez más demostraron su compromiso y vocación de servicio con la comunidad y también, en este caso, con sus amigos de cuatro patas.
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