Nuevamente como todos los años ha llegado diciembre, mes de las fiestas, de las celebraciones, comida, luces y ¿pirotecnia? Pese a que hay varios municipios que presentan ordenanzas al respecto del uso responsable o no uso de fuegos artificiales, la venta clandestina o la falta de control y, en algunas localidades, la falta de reglamentación al respecto, hace que todos los años surja el mismo debate. Pero, ¿de dónde surge la pirotecnia?
Hace aproximadamente unos 1400 años, en China, nacen por primera vez los fuegos artificiales. Estos se utilizaban para espantar espíritus malignos y se creaban a base de mezclar salitre (nitrato de potasio, un tipo de conservador de alimento), carbón, sulfuro y otros ingredientes, creando una versión inicial de lo que luego sería la pólvora. Cuando esta mezcla se arrojaba al fuego, explotaba con un estallido ruidoso. Muchos años más tarde, italianos residentes en Estados Unidos, allá por el año 1830, agregan algunos compuestos más, como distintos tipos de metales, y no solo es una explosión con mucho ruido, sino que con muchos colores. Naciendo definitivamente el uso de fuegos artificiales o pirotecnia para celebrar eventos.
La verdad es que son un espectáculo verlos, pero, lamentablemente, traen grandes perjuicios al ambiente y nuestra salud y la de los animales. Primero, tenemos que recordar que existen distintos tipos de contaminación, depende lo que se vea alterado por mano de los humanos, de esta manera, hay formas de contaminación del agua, del suelo, del aire, lumínica, sonora, visual, entre otras. En el caso particular de la pirotecnia podemos centrarnos en dos tipos de contaminación, la del aire y la sonora.
La primera, se desprende de la cantidad de partículas con diámetros menores a 2.5 nm (PM 2.5) y la cantidad de dióxido de carbono (CO2) que se liberan cuando explotan los fuegos artificiales. Los PM 2.5 son altamente perjudiciales para la salud puesto que son partículas tan chiquitas que pueden ingresar al torrente sanguíneo y a los pulmones, causando graves enfermedades que pueden ser mortales con mayor exposición a las mismas. Y el CO2 es un Gas de Efecto Invernadero, por lo que su liberación está asociado al Cambio Climático, problema global que cada día vemos más presente.
La segunda, la contaminación sonora, el fuerte estruendo de la pirotecnia afecta a las mascotas y a personas que se encuentren dentro del espectro autista o que presenten alguna afección particular. Por esta razón, muchas personas deben pasar parte de las celebraciones (que involucren pirotecnia) aislados en algún lugar de sus hogares para evitar afectaciones. Sobre esto, hay muchas campañas al respecto y leyes que prohíben la venta de estos artefactos debido, no solo al perjuicio a personas y animales en términos de contaminación sonora, sino a graves accidentes que ocurren por la mala manipulación de las mismas, contando quemaduras, pérdida de la visión y de extremidades, entre otras, sin considerar las muertes derivadas.
Está bien que muchas personas quizás piensen «bueno, pero es solo una o dos veces al año y solo tiro un cohete». Y es razonable ese pensamiento, sin embargo, si consideramos las escalas de otra manera y tenemos en cuenta que no se utilizan solamente en una casa, en un municipio ni en un país, sino que son de uso global, esta afirmación pierde sentido. Y, que no solo se utilizan para festejar las fiestas de fin de año, sino en otros eventos y fiestas a nivel nacional y global. Para dar un ejemplo, en el año 2020 en Nueva Delhi, India, en la festividad hindú del Diwali (también conocida como Festival de las Luces), se registró un valor de 689 PM 2.5, número muy elevado si consideramos que el máximo permitido es de 50 PM 2.5 debido a los problemas a la salud ya mencionados. Y esto solo en un país y en una festividad puntual. Otro ejemplo se registró en Alemania, donde, de acuerdo a los datos recogidos por la Agencia Federal del Medio Ambiente de Alemania (UBA), durante la noche de Año Nuevo del 2020 se liberaron alrededor de unas 5.000 toneladas de partículas en el aire, solamente en este país europeo; lo que equivale a dos meses de tráfico por ruta. ¡Imaginemos la cantidad en todos los países que festejan fiestas en diciembre! Es increíble.
Por esto, en estas fiestas pensemos dos veces antes de usar pirotecnia, por la salud y bienestar de todos y todas, de hoy y generaciones futuras. ¡Felices fiestas!
*Ingeniera en Recursos Naturales y Medio Ambiente. MPn°365. Email: florsrur.9@gmail.com
Deja tu comentario!