El intendente de Anchorena, Gustavo Pérez, consideró como “difícil” el año que se termina pero sostuvo que en la localidad avanzaron con obras y proyectos.
El funcionario consideró que “los primeros meses del año fueron los más complicados por la incertidumbre, pero desde mediados de año consideramos que había que trabajar en ese contexto y sin excusas”, por lo que termina el año con un balance positivo por los alcances de la gestión.
Luego de la exitosa octava edición de la Fiesta de la Tradición, celebrada días atrás, Pérez sostuvo que trabajó “todo el año en deportes y cultura, acompañando a todas las instituciones”.
A la par, mencionó “las obras en las que pudimos avanzar, entre ellas la construcción de viviendas”, pero mencionó especialmente “las refacciones en el edificio que vamos a usar como albergue, una necesidad importante para el pueblo porque no hay donde quedarse”.
Reveló que “el fin del edificio es hacer allí una Casa de los Abuelos. No tenemos en la localidad un sitio para ellos y muchos terminan yéndose en busca de cubrir esa necesidad. Por ahora el edificio será albergue y pronto comenzaremos la construcción del definitivo y podremos liberar el edificio para adecuarlo para los adultos mayores”, especificó.
Dijo Pérez que la principal apuesta “es a la producción. El municipio cuenta con proyectos propios y también hay privados que han venido a afincarse para hacer sus propios emprendimientos”. Al respecto añadió que “es nuestro objetivo para el año próximo, tenemos los proyectos siempre con la idea de generar movimiento económico y puestos de trabajo, algo que nos falta en Anchorena”.
Por estos días “se siente el desgaste y el cansancio, pero me siento muy acompañado por todo el pueblo y las instituciones y el trabajo en equipo y los proyectos me dan la esperanza de que tendremos un 2025 mejor”, cerró.
Deja tu comentario!