Desde el municipio dicen que a la distribución de las facturas no pueden hacerla empleados municipales porque ya tienen otras tareas asignadas para realizar durante su horario laboral.
Un pedido de informes sobre el reparto de las boletas de las tasas municipales en Eduardo Castex por parte de un particular que cobró más de un millón y medio de pesos por la tarea derivó en un cruce entre el concejal del Frente Justicialista Pampeano, Martín Araya, (foto) y la secretaria de Gobierno de la gestión de la intendenta Mónica Curutchet, Florencia Zumel.
La funcionaria sostuvo que ese servicio no puede ser prestado por trabajadores comunales porque no tienen tiempo en su jornada laboral, por lo que habría que «pagarles horas extras», y expresó que «la oposición claramente lo que busca es desinformar a la gente». El edil le retrucó que lo puede hacer «un empleado municipal tranquilamente» en su horario de trabajo, sin tener que abonarle ningún adicional.
Todo comenzó en la sesión ordinaria del Concejo Deliberante que se desarrolló el pasado jueves, donde Araya pidió al Ejecutivo municipal que explique por qué un monotributista realizó el reparto de los recibos por un monto de 1.558.000 de pesos. Señaló que esa persona distribuyó 4100 boletas por 380 pesos cada una y dijo que «queremos saber por qué esta labor no la realiza un empleado municipal, quién determina este trabajo y cuántas horas conlleva, ya que un empleado jornalizado que cumple funciones entre cuatro y seis horas diarias, en el mejor de los casos, como por ejemplo un afectado al Corralón Municipal, ya sea mantenimiento o reparaciones, está ganando un promedio de 280.000 pesos mensuales».
«Queremos que la señora intendenta les explique a los castenses y en particular al personal municipal qué tiene de austero e inteligente destinar más de un millón y medio de pesos del dinero público de todos los contribuyentes de la localidad en un momento de recesión económica y crisis social a un monotributista para repartir los impuestos municipales», indicó.
Respuesta
La secretaria Zumel salió al cruce del edil justicialista y aseguró que «entregando los impuestos de esta forma logramos ahorrarnos más de tres millones y medio de pesos». «La oposición busca confundir, generar dudas o hacer planteos con ciertos temas como este, pero con desconocimiento», sostuvo en declaraciones al portal CastexOnline.
La funcionaria señaló que el monotributista efectúa la tarea «de manera regular y a través de un contrato y por ello factura ese servicio. Es una facturación, es un contrato eventual para esa tarea específica».
Dijo que las boletas se reparten cada tres meses y es imposible hacerlo con los empleados de la planta permanente o jornalizados que tienen la Municipalidad «porque durante su tiempo de trabajo, de acuerdo con la función a la que fueron asignados, tienen una actividad que cumplir específica y de esa manera, si debiéramos recargarlos con este trabajo, hay que pagarles horas extras, o sea que el gasto sigue siendo el mismo».
Zumel dijo que la actual gestión trata de optimizar los recursos y que los empleados cumplan sus funciones durante el horario de trabajo, y afirmó que gracias a esta manera de repartir los impuestos en realidad la comuna ahorra alrededor de tres millones y medio de pesos, porque los gastos suben considerablemente si se opta porque el servicio lo preste Correo Argentino, como ocurría en gestiones anteriores. «Hoy Correo Argentino está cobrando para repartir este tipo de cartas simples alrededor de 1200 pesos cada una, por eso está este ahorro de tres millones y medio pagándole a una persona, contratándolo para este servicio específico», adujo.
Añadió que «a su vez esta persona lo terciariza en otras personas que se encargan de repartir toda esta cantidad de servicios municipales y habilitaciones comerciales, creando de esta manera más fuentes de ingresos para esa gente que no tiene un trabajo».
Además, señaló que «estamos también previendo la posibilidad de que más adelante sea en formato digital para dejar de tener este gasto».
«Tranquilamente»
Tras las declaraciones de la secretaria de Gobierno, el concejal Araya le retrucó que «la tarea de repartir los servicios municipales la puede realizar un empleado municipal tranquilamente. Yo la realicé en su momento durante 2020 junto a otros empleados municipales y nadie nos pagó horas extras, simplemente nos designaron esa tarea y la cumplimos durante la jornada laboral».
Sostuvo que «no está en mi intención generar un gasto más a la gestión, sino justamente ahorrar un millón y medio, afectando cada tres meses a un empleado municipal».
ElDiarioDeLaPampa
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