Docentes y trabajadores no docentes de la UNLPam cumplen este miércoles el segundo día de paro. «Hoy paramos y marchamos. Sin salarios dignos no es posible una Universidad Pública inclusiva y de calidad. Rematar nuestro país, no es el camino, ¡no a la Ley Bases!», señaló la Asociación de Docentes Universitarios.
El gremio convocó a las 18:00 horas en las escalinatas de la UNLPam para defender derechos. Invita a acercarse con velas, antorchas o linternas.
«Estamos convencidos que la Ley Bases viene a poner en riesgo la soberanía del país en tanto se apruebe el RIGI y las privatizaciones que se avizoran, todo eso afecta a la soberanía. También cuando los docentes y no docentes no estamos bien remunerados se afecta a la soberanía, a la soberanía del conocimiento, de la Ciencia y la Tecnología», declaró el secretario general de ADU, Santiago Audisio.
«Si analizamos la conducta de este gobierno, no es alentador el panorama. Uno espera que así como el 23 de abril le torcimos el carácter al gobierno con respecto al financiamiento de las universidades, esperamos que de esta forma también tomen conciencia de lo que estamos haciendo, de lo que implica lo salarial para la universidad, porque la otra vez se solucionó una parte del tema del financiamiento, pero el 90% del presupuesto es para cubrir salarios docentes y no docentes, es decir que falta un tramo largo para recomponer el presupuesto universitario en donde está incluido nuestro salario», agregó.
Respecto al conflicto universitario, estimó que «esto se soluciona con la voluntad política de recomponer nuestro salario, este 40% y ver también de cómo se continúa, en un plan de recomposición, con revisión permanente».
Sobre el acatamiento al paro, dijo que «viene muy bien porque se está realizando la siesta de facultades de la Universidad de La Pampa, los colegios preuniversitarios de Santa Rosa, el agropecuario de Realicó, y que es un paro que además tiene unas características que se viene desarrollando con este gobierno que es convocado por un frente intersindical universitario que está conformado por los gremios docentes y el no docente».
«Eso implica que en instancias como la de hoy estemos tanto docentes como no docentes haciendo esta medida de fuerza de parar las actividades laborales. Todo esto viene de la mano con el desfinanciamiento de la universidad. Es un tema presupuestario y también nuestro salario es parte del presupuesto universitario. Del 100% del presupuesto universitario total, el 90% son salarios. Y es decir que las noticias que circulan, que son reales, q están haciendo partidas para recuperar, restablecer el funcionamiento, pero no lo salarial. Entonces, esta es una instancia de trabajadores que tenemos que encarar esta medida de fuerza en reclamo de que estamos con esta gestión de gobierno retrasados en un 40% de nuestra capacidad de adquisición».
El sindicalista evaluó que sigue corriendo peligro la universidad pública. «Tal vez no esté con la intensidad y la gravedad que tenía hace un mes, pero acá la universidad tiene los ascensores que no se están utilizando para prevenir mantenimiento, que no sea frecuente, también hay recortes de gastos en la universidad. Hasta donde yo estoy también informado, la Universidad de La Pampa todavía sigue en emergencia financiera», apuntó.
Por otro lado, hay riesgo de pérdida de doentes. «Hay docentes que están cobrando tan poco que un docente que recién se inicia en la actividad docente, que tiene una dedicación simple, que quiere decir que son 10 horas semanales, que está en un periodo de formación, ese docente está cobrando aproximadamente 140.000 pesos. Es decir que con esos 140.000 pesos además tendrá que formarse, capacitarse, más allá de lo que ofrece la universidad. Entonces, por esto quiero decir que cuántos docentes se puede seguir captando o reteniendo», alertó
«Igual pasa con los que tienen mucha más antigüedad. Entonces, hay muchos que también están perdiendo el salario y más si se aprueba la ley bases de que debamos pagar el impuesto a las ganancias, son docentes que ya están mirando hacia otros lugares para conseguir un contrato o seguirse de la universidad. Eso implica que en ese caso perdemos personal altamente capacitado, formado, estamos hablando de doctores, de gente que hace investigación, que genera conocimiento, que genera ciencia y tecnología y que ellos no están en condiciones de estarlos perdiendo, son recursos humanos que tenemos que estar manteniendo. Y es decir que por ese lado también se corre peligro de que la universidad pierda calidad educativa», completó.
Los cerca de 200 mil docentes universitarios de todo el país paran por 48 horas contra el ajuste sobre los salarios que impuso el gobierno nacional al sector. La medida, según las organizaciones sindicales, logró un alto acatamiento el martes y paralizó las actividades en las más de 60 universidades nacionales en las que estudian cerca de dos millones de jóvenes.
El paro, a diferencia de lo ocurrido la semana pasada, también es acompañado por los trabajadores no docentes agrupados en los sindicatos que integran la FATUN.
Si bien el foco está puesto en el reclamo salarial de los trabajadores, la acción de 48 horas buscó deliberadamente empalmar con la sesión en la que el Senado considerará la aprobación de la Ley Bases que, entre otros artículos, dispone una profunda reforma laboral. Por eso, el Frente de Sindicatos Universitarios convoca a movilizar el miércoles en la Plaza de los Dos Congresos a la vez que continúa el paro de actividades en reclamo de aumento salarial.
Desde diciembre de 2023, las partidas salariales de los docentes universitarios se incrementaron apenas un 61,4% mientras que los precios escalaron 133,4%. Se trata de un rezago de 72 puntos porcentuales en apenas cinco meses.
El informe elaborado sobre la base del instructivo para la liquidación de los salarios del personal docente de la Universidades Nacionales y la escala del convenio de los empleados públicos destaca que el resto de los empleados del sector público nacional quedaron «solo» 42,8 puntos detrás de la inflación en tanto acumularon en el mismo período una suba de salarios del 90,4%.
El gobierno nacional acordó primero con las autoridades de la UBA y luego con la del resto de las universidades nacionales partidas especiales para funcionamiento de las unidades académicas que representan apenas el 8% del presupuesto general para la educación superior. Casi el 90% del total corresponde a los haberes de sus trabajadores y, por el momento, se encuentra congelado a valores de 2023.
El Frente Sindical de Universidades Nacionales emitió un comunicado en el cual asegura que «la ministra Petovello mintió» en tanto, explican, «en la última reunión paritaria se comprometió a tramitar los fondos en Economía y no cumplió». El gobierno, efectivamente, había adelantado la convocatoria a una reunión paritaria en la que traería una propuesta de recuperación salarial pautada para el jueves 6 de junio que nunca fue convocada.
En vistas de esa supuesta reunión los sindicatos agrupados en una de las tres federaciones sindicales, FEDUN, había discontinuado el plan de acción que el resto de los gremios sostuvieron con un paro el 4 y 5 de junio. La misma actitud habían adoptado los sindicatos no docentes.
La medida en curso, ahora, es acompañada por el conjunto de los gremios y además sumó el aval de las autoridades universitarias. Al menos las de la UBA que emitieron un comunicado en el que aseguran «respaldar el reclamo salarial de los trabajadores y trabajadoras de esta universidad pro la falta de acuerdo en las negociaciones paritarias docentes y no docentes que garantice el poder adquisitivo del salario y una remuneración que jerarquice su función».
Este miércoles la medida de fuerza se repite con un paro total y sumará una movilización contra la ley de Bases.
ElDiarioDeLaPampa
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