Nicolás di Santo, titular de la Cámara de Propietarios de Taxis de La Pampa (Catarata), manifestó su preocupación por el corte del despacho de GNC en las estaciones de servicio pampeanas, desde el miércoles pasado. “Se cortó y no cargan en ninguna estación de servicios. No sabemos cuál es el argumento, teóricamente la prioridad como todos los inviernos, es el servicio a los domicilios. A mí se me ocurre que hay una disputa para poder liberarlo más o no desde Camuzzi al valor de GNC, y uno nunca termina de entender las cosas que hay bajo cuerda en las negociaciones que siempre toman de rehén al usuario”, aseguró en diálogo con Radio Noticias.
“En estos últimos cuatro o cinco años siempre hemos tenido una semana que no ha habido suministro de GNC. Por eso ahora todos los coches relativamente nuevos, que son cilindrada 1.4 o 1.3, casi ya no se pone gas. Los que tienen 1.6 de cilindrada, con un auto más pesado, hace la diferencia poniendo GNC en el costo. La mitad de la flota tiene GNC y la otra mitad tiene nafta”, detalló, y aclaró que “el combustible, tanto nafta como GNC, ahora pasó a ser un punto crucial en la ecuación, y como a todo el mundo le va horrible, también para los tacheros es un costo desproporcionado”, enfatizó.
“Se murió la demanda”.
En esa línea, di Santo señaló que no hay demanda de taxis, “se murió la demanda porque la gente no tiene plata y nosotros no somos un servicio de primera necesidad. La gente se está manejando en bicicleta, caminando o en colectivo, después somos nosotros para una cuestión muy particular que tengan que usar el taxi. Un viaje de $4.000 es una locura para el usuario, pero con cuatro mil pesos comprás dos alfajores, entonces hay como una contradicción, juntarla es dificilísimo y gastarla, la gastás en un segundo”.
“Ahora la cuestión es comer, pagar la luz, los servicios y después ver cómo llegás a fin de mes. Antes, de noche un turno de fin de semana que era fuerte, con lo de la ley de alcohol cero, el año pasado teníamos que tener un tercer chofer para cubrir esa demanda real. Ahora de noche vos ves los grupos de pibes grandes, grupo de 20 pibes y pibas de barrios que se mueven hacia el centro y después a la salida de los boliches vuelven a sus casas caminando, eso antes no se veía. Antes usaban el taxi, ahora no”, aseguró.
“Aumento salvaje”.
Respecto al último aumento de la bajada de bandera y la ficha, di Santo dijo que “fue realmente un aumento salvaje porque por primera vez se dio el número que se tenía que dar, y el municipio respetó la polinómica que tiene costo de referencia, que solamente es recomposición de costos. En realidad no es un aumento”.
“Por ejemplo, ayer yo cambié dos cubiertas, en octubre del año pasado cada una me costó 60.000 pesos, en este momento la misma me costó 128 mil cada una, más alineación y balanceo. Todos esos costos se trasladan a la polinómica y se saca la tarifa”, describió.
Asimismo, dijo que “nosotros estábamos sabiendo que veníamos horrible, y con este nuevo aumento, donde el único que no aumenta es el sueldo, por supuesto el usuario de taxi va desapareciendo. Pero también está la otra, sin el aumento un chofer se llevaba 10 mil o 12 mil pesos a la casa, ahora con el aumento trabajando menos se lleva 20 o 22. El auto anda menos y te rinde más. Al final del día en la amortización del auto te dura más tiempo el auto, vas menos al mecánico. Esa es una discusión que inclusive se habla todos los días”.
“Ni con el frío”.
Di santo aseguró que “los primeros días de frío estábamos chochos, pero ahora ni con el frío la gente sube al taxi. Y no te cuento estos 14 días que quedan del mes. Se está hablando algo que se tiene que cambiar por ordenanza, que antes de la próxima polinómica se va a resolver, que es un aplanamiento del viaje largo. Que la gente de la periferia, que es la que usa más taxi, hay que buscarle una ecuación de alguna manera, con un número que aplane el viaje. Hay viajes que en la tarifa nocturna si vos tenés que ir de urgencia al hospital desde el Ara San Juan ronda los 10 mil pesos, y es un número que no existe, pero tampoco lo tenemos en el bolsillo”.
Calles y barrios.
Respecto del estado de las calles de la ciudad, di Santo dijo que “no hay que ser hipócritas, yo cada dos minutos puteo por las obras y los cortes, pero está genial que esté cortado porque la están arreglando. Hubo 20 años que no se hizo nada. Acá hubo una carrera que la perdieron los dos, tanto Altolaguirre como Larrañaga, porque no hicieron nada en las calles y eso provocó que la ciudad se hundiera literalmente. También la gestión de Tierno y Fernández Mendía corrieron carrera por no hacer nada. Todo eso explotó y la explosión hubo que atajarla y las calles se están arreglando para bien”.
A su vez, dijo que en todos los barrios del sudeste “hasta hace unos cinco años, esa zona que es más grande que Acha, había una sola calle asfaltada que era la Gaich. Ahora tenés muchas arterias, y tenés que hacer muy pocas calles de tierra porque hay muchas más asfaltadas”, destacó el presidente de Catarata.
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