El martes vencen los 10 días que la Corte le dio a Mendoza para responder la última presentación que hizo La Pampa por el incumplimiento del fallo de los 3,2 metros cúbicos. Un funcionario mendocino adelantó las excusas que darán.
El próximo martes vencen los 10 días que la Corte Suprema de Justicia le dio a Mendoza para responder la última presentación que hizo La Pampa por el incumplimiento del fallo para que deje correr 3,2 metros cúbicos por segundo de agua del Río Atuel. La respuesta está cantada. Un funcionario mendocino repitió que lo que reclama la provincia «es inviable», que el agua no les alcanza para regar y que hacen falta obras, pero agregó un argumento insólito: que sueltan agua, pero que se evapora.
El gobierno pampeano denunció sobreriego en campos mendocinos, la creación de 100 reservorios y hasta el desvío de agua a una bodega privada. Hace poco más de un mes, el gobierno pampeano fue a la Corte para reclamar que Mendoza no cumplía con el fallo de julio de 2020, que establece un caudal mínimo para el ingreso del Atuel a La Pampa y que todavía hoy no se cumple.
La denuncia la respaldó con fotos, imágenes satelitales y datos de la propia provincia de Mendoza, que según La Pampa muestran 100 nuevos reservorios de agua, el desvío de tres metros cúbicos por segundo de agua a una bodega, el mismo volumen de agua del Atuel que Mendoza debería dejar para La Pampa.
Cabe recordar que La Pampa logró un fallo favorable de la Corte en 2020 por una demanda ambiental. «Mendoza habla del oasis de San Rafael a partir de la utilización del Río Atuel. Hablan de 5000 hectáreas de oasis cuando han generado un desierto de millones de hectáreas en la provincia de La Pampa, apropiándose de un recurso interjurisdiccional», afirma el gobernador Ziliotto en la última presentación.
Este sábado el diario Clarín se hizo eco del conflicto ambiental. Desde el gobierno de Mendoza, que conduce el radical Alfredo Cornejo, respondió Sergio Marinelli, Superintendente de Irrigación de Mendoza, más conocido como el «Gobernador del Agua».
«La Corte determinó que nos teníamos que poner de acuerdo en un caudal de 3,2 metros cúbicos por segundo, donde la discusión posterior se ha dado en si es con obras o acciones. La Pampa insiste en que tiene que ser a como de lugar si no es nada, la Nación nunca dispuso de ningún tipo de presupuesto, que es la tercera parte que juega en esto, pero más allá del acuerdo hay una realidad que Mendoza siempre sostuvo que para poder dar ese caudal de agua tiene que haber obras. El agua que usamos en Mendoza no alcanza para lo que productivamente se necesita en el oasis», remarca Marinelli.
«La Pampa aparece ahora porque este año lo toman como un año excepcional. Sin embargo, este año es un año medio, ni siquiera llega un año medio, producto de que venimos de más de 10 años con una sequía extrema. Este año parece que hubo una cantidad de agua tremenda, pero en realidad esa cantidad de agua no es más ni menos que un poco menos que un año y medio en la provincia de Mendoza para el río Atuel», se defiende el funcionario mendocino.
Y añade: «La cantidad de hectáreas que estamos regando que son aproximadamente 52.000 hectáreas en esa cuenca, han tenido, según los modelos que nosotros manejamos y con los cuales demostramos con datos lo que decimos en base a lo que trajo el río y lo que finalmente se dispone al momento de regar, una disponibilidad real que hubo en la puerta de las fincas alcanzó a cubrir a medias la demanda de los cultivos».
Desde Mendoza aseguran que a veces va caudal por el propio lecho del río, pero que desde el último punto de Mendoza hasta el límite con La Pampa, en la zona de Vinchuqueros, hay 160 kilómetros.
«Es un lecho de río que es totalmente arenoso, muy ancho porque tiene poca pendiente, y después de tantos años de sequía es una esponja tremendamente seca. Los primeros meses empezamos a erogar prácticamente 5 metros cúbicos por segundo, tenían que llegar 3,2 m3 al límite, pero se empezó a llenar esa esponja y los primeros meses llegó muy poco. Una vez que se llenó, a partir del cuarto o quinto mes del año, ahí empezó a generarse un caudal mayor, Si tomamos en promedio los caudales que han habido, también algunas lluvias, han superado en promedio ese caudal que estaba comprometido», explica Marinelli.
Aunque hace un reconocimiento: «Lo que no sea logrado es que exista un caudal permanente, precisamente porque siempre quedó claro, y lo seguimos sosteniendo, que para que eso suceda hay que hacer inversiones y obras que tenemos que hacer las dos provincias y la Nación mejorando la eficiencia del sistema».
– La provincia de La Pampa aportó fotos en la presentación y habla de desvío de agua a una bodega -le preguntaron.
– Son dos hechos muy amañados como se presentan. En el primero sale una finca que se ve como que estuviera inundada. Todos estos suelos, como todas las colas de sistema, tienen un alto contenido salino. Entre las tareas agrícolas que se hacen anualmente, cuando se empieza a acumular mucha sal, una de esas tareas se denomina, precisamente, lavado de suelos. Una vez cada tres o cuatro años, algunas propiedades tienen que hacer ese trabajo para que el agua arrastre las sales hacia abajo y puedan cultivar. Son muy pocos casos, se hacen cada cinco años, y en los últimos 10 años y no lo ha hecho nadie, lo cual ha generado una alta acumulación de sales en el suelo.
– ¿Y sobre la bodega?
– La bodega, en realidad es una empresa que fue bodega hace muchos años, hace más de más de 20 años, lo que era el paño de viña más grande del mundo, que eran 5000 hectáreas cuando era la Bodega Arizu. Eso luego fue una quiebra muy reconocida en Mendoza, la quiebra de Greco, y finalmente vino una empresa española implantó olivos, de hecho no hay prácticamente viña, han abandonado y arrancado casi toda la viña. Hay una aceitera ahora y riegan unas 1500 hectáreas de olivos, que en esa época donde marca la erogación es cuando la aceituna requiere de una mayor cantidad de agua para que pueda obtener su máximo de productividad. Tienen todo con riego tecnificado, tienen reservorios y así y todo han tenido que ir abandonando parte del paño de olivos porque no alcanza el agua.
«Si la cuenca mendocina del Atuel tuviera que regar todas las hectáreas que están hábiles para poder implantar cultivos, hacer pasturas, la verdad es que hay mucho abandono precisamente porque no alcanza el agua», sostienen en Mendoza y así lo comunicarán a la Corte Suprema de Justicia, según publicó Clarín.
Ante la Corte, Mendoza presentó un plan de obras, donde se destaca el pedido de impermeabilización del cauce del Atuel porque aduce que el río tiene muy poca pendiente y el cauce se hace muy ancho. «Lo que pide La Pampa es inviable para hacer, tendríamos que secar la mitad del oasis para poder atender esa situación», resume el «Gobernador del Agua» mendocino.
El conflicto empezó en 1947, cuando Mendoza inauguró el embalse El Nihuil sobre el río Atuel, a poco más de 80 kilómetros de San Rafael. Ocupa más de 9.000 hectáreas y es uno de los complejos hidroeléctricos que genera energía para el país. Sin embargo, en La Pampa aseguran que la represa secó la continuidad del Atuel en La Pampa y tuvo un impacto ambiental negativo en esa provincia.
La Pampa fue a la Corte Suprema, logró un fallo en 1987, pero tras la reforma constitucional de 1994, obtuvo otro fallo favorable en 2020. El Gobierno Nacional por ley está obligado de crear Autoridad de Cuenca en cada una de las cuencas de interjurisdiccionales del país. Tras el fallo de 2020, en el gobierno de Alberto Fernández llamaron a las provincias para formar la del Atuel, transcurrieron los 120 días, pero las provincias no se pusieron de acuerdo.
ElDiarioDeLaPampa
Deja tu comentario!