Un hombre fue detenido este domingo por la policía aeroportuaria en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza tras haber sido denunciado por viajar a España para intentar matar a su expareja y madre de sus hijos.
Ese hecho motivó que el hombre sea condenado a un año y nueve meses de prisión de suspenso porque era su primera falta ante la justicia. Sin embargo las amenazas siguieron por lo que la mujer decidió dejar el país en el 2021. «Fue insostenible vivir en argentina decidimos cambiar de país y venir a vivir a España», expresó.
Ya radicada en España con sus hijos y su nueva pareja, la mujer había recobrado cierta tranquilidad hasta que un día encontró un teléfono celular lleno de cinta adhesiva en el garaje de su casa donde estacionaba su auto.
Ante el hallazgo decidió llamar a la policía de Madrid que investigó el teléfono y logró determinar que pertenecía al agresor porque fue comprado a su nombre con su pasaporte. El celular había sido pegado al auto de María Alejandra con el objetivo de poder rastrear su geolocalización mediante una señal GPS. El hombre había viajado a España para cumplir con sus amenazas de matarla.
Ante esta situación la justicia española actuó rápidamente otorgándole custodia a la víctima y poniéndole una pulsera electrónica al agresor para tenerlo localizado mientras avanzaba la investigación. Pero finalmente el hombre rompió la pulsera para salir del país violando la justicia española y este domingo fue detenido en Argentina.
«Este hombre violó el sistema penal argentino porque no se debía haber ausentado al país sin notificar al juzgado y violó el sistema penal español al romper la pulsera que tenía por el delito de abuso que se lo estaba investigando en España y volvió a la argentina», narró el abogado de la víctima Jorge Cancio. El letrado calificó al agresor como una persona que «está decidida a todo» por lo que pidió una plena ejemplar para que su defendida pueda vivir en paz.
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