Un legislador que responde a Javier Milei le pidió al Gobierno de la provincia de Buenos Aires que reprima a los trabajadores del sector de los neumáticos que están encabezando medidas de fuerza. El diputado bonaerense Nahuel Sotelo presentó un proyecto de declaración en la Legislatura provincial en el que le solicita a la gestión de Axel Kicillof que «arbitre los medios necesarios para que, haciendo uso de sus facultades a través de la fuerza pública, intervenga en el restablecimiento del derecho al trabajo de los empleados de las empresas Bridgestone, Fate, Firestone y Pirelli».
En los fundamentos del proyecto, el diputado bonaerense del bloque Avanza Libertad expresó: «Solicitamos y apoyamos el accionar de la Policía de la provincia para que las fábricas retomen el orden y los trabajadores puedan volver a sus puestos de trabajo, continuando la producción y favoreciendo a una industria que genera miles de puestos de trabajo que hoy están en riesgo».
«La Constitución de nuestra provincia garantiza la libertad de trabajo, industria y comercio a todo habitante y que el bloqueo a las empresas es el resultado de un abandono y desprotección de dicha libertad», remarcó el legislador de Milei y continuó: «Es hora de que, en nuestro país, comience a respetarse la ley por sobre la violencia y el avasallamiento de los derechos que provocan el bloqueo de estas empresas, generadoras de miles de puestos de trabajo en nuestra provincia».
El proyecto de ley sostiene que el Gobierno de Kicillof «se ha mostrado incapacitado para darle soluciones reales al sector privado, que es el principal generador de trabajo genuino» y agregó que la medida del Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (SUTNA) atenta contra el artículo 27 de la Constitución bonaerense.
«La libertad sindical no es sinónimo de sindicalismo extorsivo que es frente a lo que hoy se debe someter la apertura y continuidad productiva de estas industrias», observó el proyecto, afirmando que el sindicalismo «ya comienza a pararse la producción de toda la industria, como en las fábricas Ford o Renault que a la fecha tienen falta de neumáticos».
El legislador porteño Ramiro Marra anunció a través de su Twitter que se ponía a «disposición» de las empresas de neumáticos «para brindarles jornadas de trabajo los fines de semana» y puedan «compensar las pérdidas generadas por estos extorsionadores». Este anuncio fue repudiado en redes sociales, no sólo por usuarios, sino también por otros dirigentes.
Sotelo es legislador por la Tercera Sección Electoral de la provincia de Buenos Aires. Este año presentó una iniciativa para que los extranjeros paguen por usar el sistema sanitario provincial, cosa que contradice la Constitución bonaerense. También elaboró un proyecto para que se implemente el uso de las pistolas Taser.
Además, el legislador es referente de la agrupación libertaria La Julio Argentino, que tiene ramificaciones en el sur del conurbano bonaerense y que busca empezar a meterse en la política de las universidades nacionales a través de agrupaciones referenciadas a Milei.
Cómo está el conflicto
La conducción del SUTNA, que lidera Alejandro Crespo, y las empresas de la actividad retomarán este miercoles las negociaciones en el Ministerio de Trabajo en procura de resolver un extenso conflicto de varios meses, luego del cuarto intermedio convenido ayer ante la ausencia de acuerdo.
Sindicalistas y empresarios negociaron ayer en la dependencia ministerial una salida al grave conflicto de cinco meses, pero no alcanzaron un acuerdo, por lo que el gremio ratificó el paro general y los bloqueos a las empresas. El conflicto, que comenzó hace meses por reclamos salariales y luego se profundizó a partir de otras demandas, ya paralizó la producción de las compañías Bridgestone, Pirelli y Fate y, este martes, anunciaron una medida similar cuatro terminales de la industria automotriz.
El gremio, según sostuvo el dirigente, rechazó luego de más de 20 audiencias en la cartera laboral una mejora salarial del 38%, por lo que hace varios días convocó a una huelga por tiempo indeterminado, que ratificó, al igual que los bloqueos a las firmas.
Las empresas rechazaron la metodología utilizada por el Sutna, al que acusaron de tener «intereses políticos y sindicales» por su pertenencia al Partido Obrero (PO) y por aplicar prácticas «ilegales, autoritarias y antidemocráticas que violan la libertad de circulación y de trabajo», e indicaron que los operarios percibirían hoy un salario bruto de 400 mil pesos, si aceptaran el aumento propuesto, una afirmación que el sindicato negó.
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