El hallazgo se dio en los análisis de la secuencia genética de las muestras tomadas a pasajeros provenientes de aerolíneas de Sudáfrica que arribaron al Aeropuerto Internacional Newark Liberty a principios de diciembre de 2021.
«Estas muestras se recolectaron en colaboración con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos y XpresSpa Group, Inc. como parte de un proyecto de vigilancia del SARS-CoV-2 que implica el muestreo voluntario de los viajeros internacionales que llegan», detalla el portal precisionvaccinations.com.
Las autoridades de salud pública locales ya fueron alertadas sobre estos casos y desplegaron «todas las medidas preventivas para evitar la propagación de la cepa viral».
«Estos primeros sublinajes BA.3 de EE. UU. detectados a través del programa de vigilancia basado en viajeros brindan información sobre la variante Ómicron a las agencias de salud pública», destacó el director científico de la Oficina de Detección Molecular Avanzada de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), Duncan MacCannell, en un comunicado de prensa.
La variante Ómicron de coronavirus (B.1.1.529 por su nombre técnico), se dividió en los sublinajes BA.1 y BA.2 a principios de este mes, de las cuáles comparten algunas mutaciones.
«Ha aparecido un nuevo genoma diverso dentro del linaje B.1.1.529 que tiene todas las mutaciones compartidas de B.1.1.529, algunas de las mutaciones exclusivas de BA.1 y algunas exclusivas de BA.2 más algunas de sus propios», explicó la Asignación filogenética de linajes de brotes globales «PANGOLIN» en su sitio web.
En tanto, el Ministerio de Salud de Israel confirmó el jueves la detección de 20 casos de coronavirus a partir de la subvariante «BA2», por la que alertó ante la posibilidad de que sea «más violenta» que la original, según detallaron fuentes oficiales a la cadena KAN.
El hallazgo tuvo lugar también durante la reconstrucción de la secuenciación genética de muestras de pacientes con Covid-19 positivo.
«Contiene más mutaciones que la Ómicron original y puede ser más violenta. Sin embargo, el peligro que representa la nueva subvariante aún es incierto», explicó la entidad sanitaria al aclarar que por el momento «no había evidencia de que se comportara de manera diferente» a la cepa sudafricana.
BA2 se reportó por primera vez en China hace unas semanas aunque se sospecha que se originó en India. También se observó en Dinamarca, Australia, Canadá y Singapur.
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