Algunas la ven como un simple signo estético, otras como una declaración de intenciones o hasta la evidencia de un cambio de rumbo en la vida. Lo cierto es que los tatuajes definen mucho sobre la personalidad de las mujeres que lo portan.
Un estudio de la Universidad de Texas reveló que las mujeres que poseen cuatro o más tatuajes en el cuerpo tienen un alto nivel de autoestima.
El estudio liderado por el especialista Jerome Koch permitió ver en los tatuajes una suerte de redención de esas chicas en la vida, ya que ese mismo grupo de jóvenes es el que en su infancia se mostró más propenso a pensamientos suicidas.
«De alguna manera, a estas chicas con tantos tatuajes se las puede ver como unas‘sobrevivientes del suicidio’. Volvieron a sentir fortaleza mental y se hicieron cargo de sus propios comportamientos», explicó Koch.
Tomar el control
«Las mujeres son bombardeadas de manera constante con asuntos como la vergüenza al sobrepeso y una expectativas hipersexuales. El arte corporal, en cambio, les permite a las mujeres tener un control absoluto sobre sus cuerpos», añadió Koch.
Para los especialistas, la confirmación de un autoestima elevada se da en el momento justo de tomar la decisión de hacerse el tatuaje. «Ese momento supone un enorme desafío a la confianza en sí mismo. Es una especie de escudo de honor», declaró la psicóloga estadounidense Nancy Irwin.
«Si realmente esas chicas lograron recuperarse emocionalmente gracias al tatuaje hay que verlo como algo muy positivo. Se le otorga a ese tatuaje un alto grado de poder, ya que pudo imponerse al trauma o a esa imagen negativa de sí misma que se tenía», agregó Irwin.
El debate
Así y todo, existe una corriente que afirma que el recurso del tatuaje es simplemente un maquillaje a los problemas de personalidad existentes desde hace tiempo.
Kirby Farrell, psicólogo de la Universidad de Massachusetts, considera que la mayoría de las tendencias suicidas en las jóvenes están relacionadas a los trastornos con la personalidad y la idealización de una imagen perfecta. Por ende, ve al tatuaje como un elemento de distracción a los verdaderos problemas.
«Una gran cantidad de tatuajes puede significar que la preocupación de las chicas con sí misma se haya trasladado a los propios tatoos. Y se los considera como un parámetro para levantar la moral. Si un tatuaje genera alivio, una se puede tentar a buscar cada vez más. con tal de contrarrestar las dudas sobre la propia personalidad«, dijo Farrell.
Por su lado, la terapeuta Tina Tessina destacó que «las mujeres que tienen muchos tatuajes generalmente padecen problemas para sentirse vivas y el dolor de hacerse un tatuaje es una manera de buscar sentirse viva«.
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