El intendente de la cuidad, Leandro Altolaguirre, indicó ayer que el descalabro financiero de la Municipalidad es tal, que si no fuera por la ayuda que viene proporcionando el Gobierno Provincial ‘estaríamos con un municipio cerrado’, y agregó, en cuanto al tema más acuciante con el que deben convivir los santarroseños diariamente y desde hace años, los desbordes cloacales, que se están buscando soluciones permanentemente.
Los problemas del municipio no solo pasan por el colapso cloacal, una de las cuestiones que más irrita a los santarroseños, sino también el colapso financiero en que dejó la comuna el ex intendente Luís Larrañaga, que llevó al nuevo jefe comunal a recurrir al gobierno provincial para lograr fondos con los que afrontar sueldos y aguinaldos.
Altolaguirre indicó que el municipio adeuda más de 26 millones de pesos a los proveedores, monto que “va en aumento” permanentemente, según reconoció. Se trata de una deuda que “tiene un largo retraso y sobre la que estamos trabajando para revertirla”, dijo, pero reconoció que “todos los días encontramos deudas nuevas en distintas dependencias”.
“Yo lo que puedo decir es que estoy muy agradecido del gobierno provincial porque si no fuera por el apoyo hoy estaríamos con un municipio cerrado, porque no hubiéramos podido pagar los sueldos, y no podríamos haber seguido con la prestación de los servicios”, advirtió.
Un problema con mal olor
Altolaguirre encabezó ayer un sencillo acto en su despacho donde entregó fondos de programas provinciales a instituciones sin fines de lucro de la ciudad, por un monto total de 346 mil pesos. Uno de los problemas más urgentes que requieren soluciones en el corto plazo, ante el peligro que representa para la salud de la comunidad, es el de los derrames cloacales que se producen diariamente en distintos sectores de la ciudad.
En ese sentido, el intendente dijo que el martes se reunió con el titular de la Administración Provincial del Agua, Julio Rojo, a quien le solicitó el apoyo con los camiones de ese organismo, y también durante esa jornada hubo un compromiso de enviar a la ciudad unidades de las municipalidades de Uriburu, Eduardo Castex, Ataliva Roca, Ingeniero Luiggi y Toay.
De estos camiones el más necesario es el que posee la Municipalidad de Uriburu, ya que se trata de un aspirador desobstructor. “Los otros son camiones más chicos, pero todos necesarios”, indicó el jefe comunal, quien reconoció que las dos unidades que tiene el municipio nuevamente están rotos producto del ‘mal mantenimiento’.
Un desobstructor nuevo se espera adquirir en el corto plazo y para eso el municipio ya cuenta con el aporte del gobierno provincial del orden de los 2,8 millones de pesos, monto que aprobó el ex gobernador Jorge en su último día de gestión.
Altolaguirre se sinceró y reconoció que para abordar este problema de las cloacas ‘no tenemos herramientas’, y que se trabaja para encontrar una solución, ‘por eso estamos en el marco de una Emergencia Sanitaria’. Lamentó ‘todo el tiempo que se perdió’ y que derivó en que los derrames cloacales se produzcan en toda la ciudad.
“Yo no puedo pedirle a los vecinos que tengan paciencia cuanto tiene la casa o el comercio inundado con líquidos cloacales. Tenemos una urgencia porque está en riesgo la salud de la comunidad. Por eso el Gobierno Provincial nos está acompañando”, expresó el intendente, quien indicó que en las últimas horas se comunicó el senador Juan Carlos Marino, para informarle que gestionaría ante el Ministerio del Interior, como ya lo hizo el gobernador Carlos Verna, un aporte de 25 millones de pesos para paliar la emergencia financiera y la emergencia sanitaria en la ciudad.
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