El fallo fue a raíz de un pedido de juicio abreviado elevado por la fiscal María Cecilia Martini, la defensora oficial Silvina Blanco Gómez y el propio Sánchez, de 21 años, quien aceptó la autoría de los hechos.
El 8 de marzo, Sánchez junto a Mario Fortunsky –recientemente condenado a tres años y a una pena unificada de cinco–, y otra persona, interceptaron a un menor en la vía pública, lo rodearon y mientras uno le pegaba, otro le exigía la entrega del celular. La víctima salió corriendo, pero fue alcanzada a los pocos metros. Ahí la tiraron al piso para sustraerle las zapatillas, la mochila y una gorra y se escaparon.
El 14 de diciembre último, a la madrugada, el ahora condenado le arrojó en un bar un botellazo a Daniel Alberto Saavedra, impactando sobre el lado izquierdo de la cara y luego le dio un puntazo en la parte izquierda del abdomen.
Y antes, el 25 de agosto, durante un allanamiento a su casa, se constató que tenía en su poder un malacate eléctrico, una presa neumática y otras herramientas que le habían sido sustraídas días antes a Ricardo Vicente Lezcano. Además, un kit de puesta a punto de motores, con dos relojes de medición; un soplete; tres cajas vacías de herramientas; y otros objetos que también en los días previos le habían sido robados a Héctor Isolino Dunel.
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