Y agregó: «Y la sociedad por muchos años escondió que el parto es peligroso, de hechoArgentina lleva 30 años sin poder bajar la mortalidad por el embarazo y es la cuarta causa de mortalidad en mujeres jóvenes. Es decir, no es una cosa rara. Muchas mujeres hacen preeclampsia, hipertensión, desprendimiento de líquido amniótico, entre otras enfermedades que no se pueden prevenir. Entonces, el planteo es empezar a pensar en las mujeres de otra manera, no como la sociedad nos estigmatiza como que somos unas locas e irresponsables que vamos a ir en tropel si esto se libera, porque de hecho es un absurdo».
Y en esta línea de concepto, sostuvo: «Como el parto es potencialmente mortal, no puede ser obligatorio. Es más fácil entender si lo comparamos con los varones. Es como si dijéramos ya que las mujeres ponen en riesgo su vida para perpetuar la especie, hagamos una ley que obligue a los varones que arriesguen su vida para mantener la vida de los ya nacidos, por ejemplo si un chiquito precisa un riñón para mantener su vida, hagamos una ley que obligue a todos los varones compatibles a donar ese riñón y salvemos la vida de ese niño… pero enseguida decimos que sería una locura. No hay ley que obligue a nadie a poner en riesgos su vida para salvar al otro, solo con las mujeres se da esto. Y esto hay que leerlo con perspectiva de género».
Manzano relató que por muchos años negó como profesional los abortos de las mujeres porque tenía incorporado el miedo que se ha metido desde tiempo sobre el tema, explicó a Infopico. «Entonces nos limitábamos a hacer abortos cuando la mujer se estaba muriendo y el resultado era que muchas veces se nos moría. He visto morir mujeres con cánceres, con lupus, con insuficiencia renal que se les negaba el aborto, he visto morir a nenas violadas... fueron cosas muy dolorosas en mi vida. Porque se le exige a las mujeres a ser heroínas, cosa que no se le pide a nadie por ley», recordó la médica.
Y ante los casos de mujeres violadas tengan su embarazo, para luego dar en adopción al bebé, sostuvo que es cruel obligarla a seguir sufriendo para que otra pareja, sana y feliz, tenga su hijo. Inclusive sacó cuentas de que a 500 mil abortos por año en Argentina, cada pareja del país debería adoptar unos 20 chicos.
«Creo que tenemos que cambiar el foco y tener pena de las mujeres, de las nenas embarazadas a propósito, de pensar que somos seres morales que tomamos muy en serio la maternidad, cuando una mujer dice no puedo y está desesperada, esa mujer necesita nuestro apoyo para que pueda optar y no nuestro prejuzgamiento y nuestro odio. A nadie nos gustaría que nos obliguen a casarnos con quien no queremos, a hacer cosas que no queremos, pero a las mujeres se les obliga a ser madres aún cuando no quieren o no pueden hacerse cargo», argumentó Manzano.
El portal piquense informó que en General Pico, la totalidad de los médicos de Tocoginecología ha argumentado objeción de conciencia para no hacer los abortos no punibles (aquellos que la ley permite en caso de violación, peligro de vida para la mujer o inviabilidad del feto).
Según la ginecóloga chubutense, «la objeción de conciencia no es un Derecho Humano. Se basa en el artículo 19 de la Constitución, que dice que podemos hacer todo lo que la ley no nos impide siempre y cuando no vulneremos derechos de terceros. Es muy claro. En la medicina nadie me obliga a ser ginecóloga, es más nos pagan por ello y aceptamos las reglas de juego. Entonces, desde el art. 19 la que está amparada es la mujer, porque puede interrumpir el embarazo ya que no afecta derechos de terceros, pues el feto no tiene derechos. Recién cuando un bebé nace y respira, tiene legalmente derechos».
«En cambio el médico lo que hace es discriminar porque antepone su ideología a los derechos de otros. Pensemos por ejemplo, en un médico Testigo de Jehová que va a trabajar al sector transfusional del hospital, no va a hacer transfusiones porque su religión no se lo permite, pero al Ejército y cuando haya una guerra se niegue a participar y levante a todos sus compañeros en contra de ella, porque total hay un soldado que no presenta objeción de conciencia… es loco pero así son nuestras leyes. La objeción de conciencia es un eufemismo que la Iglesia Católica creó en los ’80 ante los avances de la mujeres y lamentablemente la Iglesia Evangélica se unió», aseguró.
Finalmente, habló de la hipocresía de los ginecólogos que hacen abortos clandestinos por 8 mil, 15 mil o 40 mil pesos (según el estado de embarazado) pero se niegan a hacerlos en los hospitales públicos.
Deja tu comentario!