El exempleado de la Dirección de Hidráulica de la Municipalidad local, Mario Capello, cumplió en la gélida jornada de ayer dos meses de protesta en reclamo de su fuente laboral, de la que fue excluido ‘injustamente’ y sin que hasta el momento nadie de la comuna se haya interesado en su situación personal ni en la de su familia, compuesta por su mujer y seis hijos.
Capello mantiene desde hace 60 días un reclamo público frente al municipio. Si bien en un primer momento colocó su carpa en la Plaza San Martín, luego de que desconocidos lo ‘apretaron’ para que se vaya del lugar y le robaran un par de cobijas, decidió trasladar el reclamo a la vereda del municipio, justo frente a la ventana del despacho privado del intendente Luís Larrañaga, que hasta ahora no lo ha recibido.
A pesar del paso del tiempo y de estar en la puerta misma del municipio, hasta el momento, según indicó el hombre, nadie se interesó por su reclamo, ni siquiera por cómo está su familia integrada por su esposa y seis hijos.
Son varios los vecinos que le acercan comida o bebidas calientes, pero lo que Capello reclama es que se le vuelva a dar trabajo en el municipio, a donde trabajó hasta que la actual gestión no le renovó el contrato que lo vinculaba a la Dirección de Hidráulica.
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