El empresario, señalado como agente iraní por el fiscal Nisman, alquila un campo en la provincia desde hace unos 4 años, según pudo saber El Diario de una fuente que tuvo un estrecho contacto personal con él.
“Durante este tiempo desplegó contacto con empresarios y comerciantes locales con los cuales realizó negocios vinculados con la entrada y salida de divisas…entre ellos también algunos extranjeros frances con campos en la misma zona”, destacó la misma persona.
El Diario viajó ayer hasta el establecimiento rural. El campo, que no tiene nombre, parece ser un refugio. Está ubicado sobre un camino vecinal, que se toma en el kilómetro 130 de la ruta 14, camino a la escuela rural de Chapalcó al oeste de Toay. Sería propiedad de una familia tradicional de la zona de apellido Arteaga.
Hay que recorrer unos 10 kilómetros por ese camino, arenoso, con lomas para llegar al lugar. Ahora está lavado en algunas partes por la lluvia, donde emerge la tosca. Pero es un camino transitado por los productores y propietarios de los campos de la zona.
La propiedad que Yussuf Khalil alquila en La Pampa tiene unas 650 hectáreas. Es una zona de monte de caldén. Productivamente apenas sirve para meter algunos vacunos en pastoreo.
El puesto del campo tiene un aspecto descuidado, casi como abandonado. En la entrada del casco pegado a la calle, después de la tranquera, hay yuyos crecidos y varios elementos tirados, algunos casi con fines decorativo. La pintura aparece como descascarada. Pero tiene en el techo una antena de Direct Tv y es visible otra antena satelital de mayor tamaño: la precariedad del lugar contrasta con este dispositivo de comunicación.
El hombre señalado como agente iraní por el fiscal Nismal usa habitualmente una camioneta Toyota doble cabina, gris oscura. “Viene con su familia al campo al menos una vez por mes y los fines de semana largo….pasa desapercibido casi siempre”, precisó la fuente.
También contó que tiene férreos hábitos mulsulmanes: en las comidas el alcohol está ausente. Pero cultiva el hábito de fumar habanos. “Es corriente verlo fumando un habano mientras maneja rumbo al campo”, agregó.
Yussuf Khalil está vinculado desde hace unos cuatro años con La Pampa. Es pariente directo de la familia Jamad. Precisamente por su actividad comercial, Khalil ofrece servicios que bordean -en algunos casos lo cruzan- “los límites de la legalidad, sobre todo para la salida de divisas al exterior”, añadió la persona que habló con este diario. En estos años, desarrolló una intensa actividad para entablar lazos comerciales con diferentes empresarios del medio.
Además, Khalil tiene la firma Oriental Bok -según informaron los medios porteños- dedicada a la exportación e importación, e intermediación en el comercio de mercadería y servicios para terceros. Es de padres argentinos y origen libanés.
El diario
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