El “no” del gobernador y líder de la línea Compromiso Peronista, Oscar Mario Jorge, a las pretensiones del jefe del Partido Justicialista y referente máximo de Convergencia Peronista Pampeana, Rubén Hugo Marín, a avanzar con gestos políticos para evitar la interna partidaria activó las sensaciones de la dirigencia. Ayer, el excandidato a diputado nacional, Espartaco Marín, comentó al respecto: “Creo que es necesario hacer el último esfuerzo en búsqueda de la unidad de nuestro partido y, en caso de no conseguirse, aportar para que la interna se desarrolle con total respeto, poniendo en discusión los diferentes proyectos políticos y no las diferencias personales”.
Ante las referencias de los dirigentes propios de dirimir en internas las próximas candidaturas Espartaco dijo descreer que el afiliado y los independientes partícipes de este tipo de compulsa pidan la confrontación, “ni a nivel nacional ni a nivel provincial el peronismo puede darse el lujo de ir a una interna descalificadora que nos divida de cara a la elección general. En ambos escenarios necesitamos alguien que garantice el triunfo. Si dividimos nuestro caudal electoral en agosto, es difícil juntarlo en octubre; ya nos pasó. Que no nos vuelva a suceder” señaló.
Si hay internas, ¿Convergencia apostará a Verna o a Bruna?
Si inevitablemente no llegamos a un acuerdo partidario, nuestra línea va a tomar su posición consultando a sus militantes de toda la provincia. Estamos organizando un encuentro provincial de nuestra línea, que se llevará a cabo esta semana, para recabar información de cada localidad y en base a eso elaborar un documento donde fijaremos nuestra posición, que no va a ser otra que la de siempre: intentar aportar al triunfo del Justicialismo con el candidato que creamos que lo garantiza. Lo hicimos con nuestro conductor Marín en 4 oportunidades, pero también con Ahuad, Verna y Jorge. Siempre priorizamos nuestro partido al posicionamiento de la línea, incluso relegando candidatos propios en pro del triunfo del Justicialismo, como en 2011.
¿Acepta la postura de Marín de realizar una encuesta previa para tratar de evitar la interna?
Claro, no solo me parece acertada, sino que me parece absolutamente necesaria. Marín viene pregonando la unidad desde hace bastante y ha hecho todos los esfuerzos no solo para mediar entre los distintos sectores del Justicialismo sino también para profundizar el diálogo institucional entre el Gobernador y algunos diputados. Por lo tanto, siendo consecuente con ese mensaje, propone evitar la interna midiendo a los mejores candidatos días antes al cierre de la lista.
En casi todas las encuestas, Verna está primero, ¿eso no sería una manera elegante de apoyarlo?
No, eso sería una manera concreta de garantizar el triunfo electoral del Justicialismo con un candidato instalado evitando grietas internas. Faltan dos meses para el cierre de las listas, hay tiempo para que quien no esté instalado, intente hacerlo. No podemos forzar una interna solo por prejuicios, diferencias o rencores personales. El pueblo de la provincia de La Pampa que nos ha confiado siempre la responsabilidad de gobernar, está por encima y además no lo merece.
Pero en 2013 usted participó en una interna…
Si en 2013 hubiéramos tenido en cuenta las mismas encuestas que el propio Gobernador mandó a hacer, se podría haber evitado la interna o por lo menos no creo que hubiera habido 7 listas.
Pero hay quienes dicen que lo que está en juego es el recambio generacional y el apoyo al gobierno nacional…
Es un error. Decir que el recambio generacional lo garantiza solo un sector del Justicialismo es cuanto menos mentiroso. En todas las líneas hay jóvenes que militan y se preparan para ocupar espacios de poder y otros que ya los ocupan. Arrogarse la exclusividad de la representación juvenil, como si solo eso garantizara eficacia y buena gestión, es equivocado.
¿Y con respecto al apoyo al Gobierno nacional?
Mirá, en todas las líneas hay compañeros que acompañan al proyecto nacional y otros que no tanto. En nuestro caso hemos sido consecuentes con este gobierno, acompañamos el proyecto nacional y no desde ahora. Militamos y apoyamos lo que consideramos que se hizo bien, reclamamos lo que creemos que está pendiente y aportamos alguna propuesta con lo que creemos que se debería hacer. Esa es la manera más útil de acompañar un proyecto; la obsecuencia no es buena consejera. Eso está a la vista, sino explicame cómo pasamos del 54% al 33% en dos años. Hay que volver a hablarle a aquel que nos acompañó en 2011 y hay que persuadir al que piensa distinto. Si solo nos quedamos con los propios, no alcanza.
Fuente: DiarioLaReforma.com.ar
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